“Os agoiros e temores sobre o posible arrastre de cinzas e terra á ría de Arousa por culpa do grande incendio forestal que arrasou a Serra do Barbanza están a cumprirse”. Así lo manifestó ayer el BNG comarcal, que reprochó a la Xunta de Galicia que no puso los medios necesarios para evitar que el efecto arrastre llegara a la ría, a pesar de las advertencias del sector pesquero y marisquero, de la preocupación de alcaldes o de la propuestas de la formación frentista. Su diputada Rosana Pérez y los portavoces municipales en Rianxo, Boiro, A Pobra y Ribeira instaron al Ejecutivo autonómico a tomar las medidas oportunas para evitar que cenizas y tierra quemada alcancen los ríos y regatos y no lleguen a la Ría de Arousa.
“Á vista dos acontecementos, cuestionámonos se as medidas adoptadas foron suficientes, a pesar de que pouco despois do incendio o conselleiro do Medio Rural anunciou a bombo e prato as medidas para evitar que as cinzas acabasen en ríos, regatos e mar, pero desgrazadamente a realidade é outra” dijo Pérez. La parlamentaria le reclamará a Mar y Medio Rural que informen de lo que se hizo e insta al Gobierno gallego a analizar las consecuencias de los arrastres. “Débese actuar de inmediato para coñecer se as cinzas afectaron aos bancos marisqueiros e, de se confirmar, establecer liñas de axudas ás confrarías”.
Luis Pérez Barral, responsable comarcal del BNG barbanzano, recriminó la actitud “negacionista” de la Xunta de Galicia respecto de la realidad, en lugar de ponerse a trabajar para evitar daños económicos y ambientales mayores. Y le solicitó al Gobierno gallego que abra un diálogo con las comunidades de montes para tratar de recuperar zonas arrasadas por el fuego y apostar por un modelo en el que haya rendimiento económico, pero también en el que se cuide el medio natural, potenciando las especies autóctonas.