La titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 3 de Ribeira decretó poco antes de la una menos veinte de la tarde de ayer el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza para José Carlos Outeiral Montes, alias “Perico”, de 38 años, natural de Porto do Son pero que vive en la capital barbanzana. La Policía Local lo detuvo pasadas las siete menos veinte de la madrugada del martes como presunto autor de un delito de robo en una vivienda habitada en la Avenida Rosalía de Castro, en pleno casco urbano de la capital barbanzana. El hecho de que las personas que viven en ese inmueble se encontrasen en su interior en el momento en el que ese individuo presuntamente perpetró el delito pesó bastante en la decisión de la togada, pero también otras cuestiones como el riesgo de reincidencia delictiva y la alarma social generada, pues cuenta con bastantes antecedentes.
Ese ladrón pudo ser descubierto por sus propias víctimas al quedarse dormido en el rellano de las escaleras de un edificio donde está el primer piso asaltado y en el que desde hace tres meses vive de alquiler un matrimonio de nacionalidad ucraniana con sus dos hijas. Esa pareja estaba durmiendo y a las 6.30 horas se despertó ella y se puso a buscar el gato, y se percató de que la puerta de entrada a la vivienda esta abierta, cuando ella sostiene la habían cerrado. Ella despertó a su marido y, tras inspeccionar el piso y comprobar que no había nadie dentro, se dirigieron a las zonas comunes del inmueble, y al empezar a bajar por las escaleras hacia el portal de entrada, se encontraron al sospechoso tumbado en el referido rellano y que junto a él había algunos objetos que tanto ella como su esposo reconocieron como pertenencias suyas, como un IPAD y un ordenador portátil, que pudieron recuperar en ese instante, pero hay otros efectos que echaron en falta y no descartan que pudieran haber participado otras personas y que si pudieron huir con el botín.
Mientras permanecían al lado del ladrón para, en caso de que se despertase, poder reternerlo, las víctimas avisaron a la Policía Local que, tras llegar, procedió a la detención del “Perico”, un viejo conocido de las fuerzas de seguridad, por la presunta comisión de un delito de robo. Luego, lo trasladaron a los calabozos de la comisaría del Cuerpo Nacional de Policía, para que sus efectivos continuasen con las diligencias de investigación y en torno a las once de la mañana de ayer lo pusieron a disposición de la jueza de guardia, ante la que el investigado se acogió a su derecho a no declarar. En torno a las 12.40 horas, el investigado por robo salió de las dependencias judiciales acompañado por agentes de la comisaría para dirigirse a la Jefatura de la Policía Local, donde quedó en custodia hasta las cinco de la tarde, momento en que acudió a recogerlo un furgón de traslados de la Guardia Civil, que lo llevó a la cárcel provincial de Teixeiro.