Tres ribeirenses crearon un grupo de voluntariado para llevar a cabo el acompañamiento en el domicilio, así como telefónico, de personas mayores que viven solas en Ribeira. Natalia Gil, Cristina Suárez y Raquel Barba se pusieron al frente de esta iniciativa al comprobar la necesidad que hay de atender esa importante carencia. Este domingo, cuando tuvo lugar su presentación en sociedad, fueron otras cinco personas las que mostraron su intención de colaborar, y confían en seguir aumentando, para lo que los interesados pueden llamar al teléfono 625 379 333 y preguntar por Raquel. Desde este equipo de personas indicaron que los que quieran ser voluntarios sólo necesitan de una hora a la semana para prestar su ayuda, pues uno de los objetivos que persiguen es seguir creciendo y mejorando, con la ayuda de los profesionales y emprendedores de su entorno.
Su puesta de largo tuvo lugar en un evento que se celebró en la primera planta del edificio municipal que alberga la plaza de abastos, con una merienda y mercadillo solidarios, y que contó con el representación de la corporación municipal por parte de la portavoz del PP, Mariola Sampedro. El acto estuvo auspiciado por Acción Solidaria de Galicia (Asdegal), que preside Teresa Martínez y de la que en su representación asistió su vicepresidenta, Teresa Berbel, y de la que el grupo ribeirense se constituyó como delegación. Desde esa ONG, que nació hace tres lustros en Vigo cuando se juntaron media decena de personas para ayudar a mayores que viven solos y se extendió a la infancia, indicaron que se ramificó hasta contar con delegaciones en Santiago, A Coruña, Pontevedra y Ferrol, junto a otra localidad más pequeña, como Redondela, y a las que hace un mes se sumó Ribeira. Y añadió que las empresas amigas de Asdegal son fundamentales para mantener con vida sus proyectos de ayuda a personas en riesgo de exclusión social. En este sentido, precisó que para que las empresas puedan hacerse amigos protectores y solidarios, así como para realizarse donativos particulares, se pueden aportar las cantidades de dinero que cada uno desee.
Fue a finales de 2022 cuando las tres ribeirenses mencionadas tuvieron contacto con Asdegal y lo primero que hicieron con ella fue tejer 80 bufandas para mayores de residencias en Galicia, y luego continuaron hasta junio elaborando esa misma prenda y gorros para niños refugiados de Ucrania. Hace 12 meses organizaron un mercadillo solidario en el auditorio, que fue con lo que se puso en marcha el grupo de voluntariado, y se vendieron adornos para el árbol y la mesa de Navidad. Tras juntarse los viernes desde octubre pasado para elaborar más objetos decorativos, así como delantales, servilleteros, bolsas y bolsos, este domingo repitieron la experiencia junto con una merienda solidaria, en la que se sirvió chocolate con churros y bizcocho donado por Confitería Dominga, y que amenizó la rondalla de la asociación musical Albéniz de Aguiño.
Al rematar el acto, se realizó un sorteo entre los asistentes de varios obsequios, entre los que había una noche en el hotel rústico Casa do Prado, en Abanqueiro, así como un set de colonias, bisutería de la tienda Maana, dulces artesanales decorativos de Mil Galletas, un par de botellas y copa de vino espumoso y sesiones de manicura y pedicura y de masaje relajante de Laura Bermo. Todos los asistentes, se llevasen o no un regalo, se fueron satisfechos por colaborar con la causa.