La crítica situación que padecen los centros de salud de O Barbanza vivió en la tarde de ayer un nuevo episodio. Fue en el centro do salud de O Saltiño, en Boiro, donde no había ninguno de los tres médicos titulares de las plazas existentes para atender consultas en el turno vespertino. Ello se debió a que uno se jubiló y su plaza no se cubrió, mientras que hay otro que está a punto de retirarse y ahora disfruta de sus vacaciones, tras las que ya no se reincorporará al servicio. A esos dos casos se sumó que el tercero, que es un FEAS (Facultativo Especialista en Atención Primaria), realizó este domingo una de las dos guardias obligatorias mensuales de 24 horas cada una en el Punto de Atención Continuada (PAC) boirense, por lo que ayer le correspondió día de descanso.
Según indicó algún paciente que acudió a las consultas y comprobó que no había facultativos, el personal administrativo del ambulatorio les remitió a que acudieran al PAC, en donde ayer sólo había un médico y una enfermera, debido a que de las 6 plazas que tiene dicho servicio hay dos sin cubrir después de que quedasen vacantes tras la marcha de dos profesionales en un concurso de traslados, mientras que otras dos se corresponden con jubilados y, además, ayer hubo otro de baja. Se dio la circunstancia de que ese único médico en activo tuvo que salir a atender una urgencia en un domicilio y que los pacientes que fueron llegando debieron esperar, con lo que cuando llegó el médico ya había 9 personas aguardando para ser atendidas en el PAC.
Según informaron fuentes próximas al ambulatorio boirense consultadas por este periódico, esta no es la primera vez uqe se registra una situación similar en el último mes. Añadieron que en la mañana de ayer ya se temían que iba a producirse este problema y que la Xerencia da Área Sanitaria Santiago-O Barbanza era conocedora de la misma, así como de otras que se fueron registrando en las últimas semanas, pero advirtieron que sus responsables no adoptaron medidas adecuadas para corregirl lo que está pasando.