La Policía Local de Ribeira llevó a cabo en la madrugada del domingo, de manera conjunta con una patrulal de la comisaría, un control de alcoholemia en la Avenida da Coruña, en la zona de Coroso, en la entrada hacia el casco urbano de Santa Uxía, que se saldó con tres conductores denunciados al superar la tasa de alcohol máxima permitida. Uno de los denunciados fue el piloto de una motocicleta, que arrojó un resultado que superó la tasa de 0,25, mientras que los otro dos iban a los mandos de dos automóviles, y ambos ofrecieron tasas entre 0,50 y 0.60. Por ello, los tres infractores fueron denunciados por vía administrativa, lo que acarreará la pérdida de seis puntos y multas de 1.000 euros, cada uno de los casos. Esos tres vehículo no fueron inmovilizados al hacerse cargo de los mismos personas que estaban habilitadas para ello.

Por otro lado, fuentes municipales informaron que durante la realización de ese control se denunció a un Ford C-Max que carecía de seguro obligatorio, por loque se procedió a su inmovilización. Además. un Wolkswagen Golf fue denunciado e inmovilizado debido a que circulaba a escape libre, al no contar con silenciador ni catalizador. Esta mañana fue acompañado a someterse a la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) que se le obligó a realizar para comprobarlo y que no superó, por lo que deberá subsanar esa deficiencia, que fue considerada como una infracción grave.