La Avenida da Coruña, a la altura del número 147, en O Caramecheiro, fue escenario a las nueve de la mañana de ayer de un accidente de tráfico, consistente en una colisión múltiple por alcance, en el que se vieron implicados tres coches y una motocicleta, cuyos conductores resultaron heridos, siendo tres de ellos trasladados por una ambulancia de Soporte Vital Básico (SVB) de Urxencias Sanitarias de Galicia-061 al Hospital do Barbanza, y la otra víctima quedó en acudir por sus medios para recibir asistencia. 

En el momento en que se produjo la colisión había circulación lenta en ese vial, por tratarse de una hora punta. Un Citroén C5, conducido por M.R.R.T., vecina de Ribeira de 66 años, se detuvo y lo mismo hicieron una motocicleta Suzuki CC, pilotada de J.M.S.V., de 59 años y residente en A Pobra, y un Kía Venga, a los mandos de M.D.L.P., de 52 años, pero el que iba a continuación, un Ford Focus C-Max, conducido por M.C.M.E., de 40 años y residente en Ribeira, no paró, posiblemente por un despiste, y golpeó al que le precedía y fue cuando se produjo la colisión en cadena múltiple.

Fue un particular el que a las 9.05 horas contactó con el 112 para comunicar lo sucedido e indicó que había heridos y sus gestores dieron traslado del suceso al 061, a la dotación de guardia del parque de Bomberos de Ribeira y al Grupo de Atención ás Emerxencias Municipal (GAEM), que adoptaron medidas de seguridad, y a la Policía Local de Ribeira, que instruye el atestado. Uno de los efectivos de este cuerpo de seguridad recabó toda la información del siniestro, mientras que el otro reguló el tráfico debido a que se estaban registrando importantes retenciones que alguno de los que se vieron atrapados lo calificó de “atasco monumental”. 

Ello se debió a que los tres coches ocupaban el carril de entrada a la ciudad y la motocicleta, que cayó lateralmente, estaba tumbada sobre el de dirección salida del casco urbano ribeirense, y no había muchas alternativas para desviarse y tomar rutas alternativas. Una vez que se tomaron fotografías del accidente, se retiraron los vehículos implicados y, con la destreza de los efectivos de la Policía Local ribeirense, se recuperó poco a poco la normalidad del tráfico.