Mariña trajo al nacer el pasado 16 de marzo, tal y como se dice popularmente, un pan debajo del brazo, y con dos meses hizo que a su madre, Ana Lens, le hubiera sonreído por primera vez la diosa Fortuna, en forma de cheque de 1.000 euros -le quedó en 810 euros tras descontarse la retención- para gastar en un día que el pasado 9 de mayo sorteó la Asociación de Empresarios de Ribeira con motivo de la campaña programada con motivo del Día de la Madre. Y ese día para hacer las compras llegó hoy, cuando desde primera hora de la mañana esta joven ribeirense, junto a su marido, Manu, y su bebé en un carrito, empezaron su periplo por los negocios asociados a esa acción comercial, un pequeño detalle que le hizo cambiar los planes que inicialmente tenía bastante claros de comprar pañales para la niña.
Después de pasar por algunos de los comercios de la ciudad como Electrodomésticos Milar, Lolita Moda, Lápices de colores, Gena's o Trastiños, llegó el momento de pasarse por Chinela, donde realizó la compra de un cinturón y cuyo ticket fue el agraciado con el citado premio, y allí le atendió su empleada Isabel Quintáns, le atendió para venderle lo que quería. La dueña del establecimiento estaba muy satisfecha por el hecho de haberle dado suerte a una de sus clientas. A media mañana, Ana Lens indicó que parte del dinero ya se lo gastó en la compra de unos zapatos para ella y otros para su pareja, así como una secadora para la familia, pero precisó que buena parte de las compras serán para a su bebé, pues dijo que a esas edades necesitan muchas cosas, y ya tenía en la lista de la compra un parasol y un sonajero, entre otras.