La jefa de sección de Servicios Generales y Patrimonio de la Dirección Provincial de A Coruña de la Tesorería General de la Seguridad Social (TGSS) envió ayer un coreo electrónico dirigido a la Cofradía de Pescadores de A Pobra para disculparse por las actuaciones llevadas a cabo hace unos días por la empresa adjudicataria de la reforma de la Casa do Mar pobrense, en las que se cortó parte de la reja de una ventana de la sede del pósito y tapiase parcialmente esa ventana. E indicó que en cuanto se enteraron de loque había psasado, ya hablaron con ellos y con el director de obras para que dejen todo tal y como estaba. "Sentimos las molestias ocasionadas y sobre todo el cabreo que imaginamos que sintieron cuando lo vieron", concluye el mensaje remitido.

Cabe recordar que había ido el patrón mayor de la Cofradía de Pescadores de A Pobra do Caramiñal, Enrique Maceiras, el que denunció en la tarde del pasado viernes en el cuartel de la Guardia Civil de Boiro la situación que se había encontrado en torno a las 14.00 horas cuando él y otras personas del pósito pobrense acudieron a la sede de la entidad en la Rúa Castelao, en pleno casco urbano pobrense, en la que habitualmente no hay nadie, pues sus oficinas principales se sitúan en el inmueble que alberga la lonja, en la zona portuaria, y se encontraron que alguien había cortado parcialmente la reja de una ventana de la planta baja del edificio y que la habían tapiado en esa zona, sin que nadie les hubiera informado de nada de eso. 

Sin querer apuntar a resposnsable alguno, Enrique Maceiras indicó en ese momento que se daba la coincidencia de que una empresa estaba realizando unas obras en el edificio contiguo en el que se ubican las oficinas de la Tesorería General de la Seguridad Social, al parecer, para proceder a su acondicionamiento y la instalación de un ascensor, pero sospechaba que que pudieran haber sido sus operarios los que realizaron esa "chapuza". Ante las las dudas que tenían sobre la autoría de los hechos, es por lo que desde la Cofradía de Pescadores decidieron poner los hechos en conocimiento del instituto armado para que abra una investigación, precisando que el céntrico edificio en el que se ubica la sede del pósito "hai que protexelo". El patrón mayor de A Pobra manifestó entonces que esperaba que esa actuación se aclare y que el responsable restablezca la situación anterior.