La playa pobrense de A Lombiña-Cabío fue escenario a media tarde del jueves de un rescate de una mujer que ronda los 70 años y que se sintió una indisposición cuando se encontraba en el agua. El socorrista que permanecía vigilando en la caseta se percató de que había un bañista que se podría estar ahogando y que empezó a aglomerarse gente en la orilla. Fue entonces cuando se dirigió hacia ese lugar, a la vez que solicitó la intervención de sus dos compañeros que estaban recorriendo el arenal, así como la presencia de una ambulancia del 061, pues precisaba de asistencia médica. 

Uno de los socorristas la sacó del agua y entre los dos la llevaron hasta la caseta, donde la atendieron, le tomaron la tensión, le dieron agua para beber y estuvieron hablando con ella y su marido hasta la llegada del vehículo asistencial, que la trasladó al centro de salud para que recibiera la asistencia médica que precisaba y le practicasen las pruebas apra determinar su estado. La víctima, que aún estaba algo mareada, indicó que estaba nadando y que se empezó a sentir sin fuerzas, el miedo la atemorizaba y que empezó a hundirse. Al parecer, a ella se acercaron para ayudarla cuatro personas que, según los socorristas, no estaban haciendo un buen trabajo, sobre todo, sobre todo porque no la estaban colocando en posición adecuada.