El Gobierno local de Ribeira pretende solicitar a la Xunta de Galicia que asuma la gestión y mantenimiento integral de la Escola Infantil Municipal, ya se por parte del Consorcio Galego de Servizos de Igualdade e Benestar o un ente que lo sustituya. Esta propuesta, que será llevada al pleno que está previsto que empiece a las ocho de la tarde, se formula en base al informe emitido por el departamento de Servizos Sociais del Ayuntamiento ribeirense. Y se propone facultar al alcalde para garantizar la plena efectividad del acuerdo en caso de que la iniciativa salga adelante.
En ese informe se advierte del muy significativo incremento de los costes de gestión y mantenimiento de la guardería municipal en los últimos años -pasaron de 245.254 a 417.683 euros entre 2019 y 2023, y se estima que el coste para el curso actual ascienda a 559.600 euros, cantidad de la que se calcula que su 62% saldrá de las arcas municipales, es decir 348.000 euros, mientras a la Xunta le corresponderán 160.000 euros y a las familias 50.600 euros-, que indica que fue causado por el importante aumento de los costos laborales y de la vida, así como la creciente demanda de más servicios de conciliación e y la “gratuidad de atención educativa“ promovida por la Xunta.
Además, se detalla que, ante esa situación, cabe la posibilidad de que la gestión recaiga en el referido consorcio, con la finalidad de seguir prestando ese servicio y hacer sostenible su mantenimiento, sin que suponga una losa para ofrecer a los vecinos los servicios que son propiamente de competencia municipal, tales como obras, mantenimientos de vías, limpieza, parques y jardines, educación comunitaria y otros. Los Servizos Sociais señalan que la medida propuesta disminuirá los costes y liberará personal municipal de la gestión y seguimiento de ese servicio para dedicarse plenamente a otras labores de los ámbitos social y educativo, ya que la previsión de los costes en los próximos años es al alza, puesto que no existe previsión de una mayor financiación o un modelo de gestión alternativa a la que ahora se propone ahora.
Otro asunto que está previsto que se aborde en el pleno ordinario es la auditoría sobre la red municipal de abastecimiento, que concluye que el rendimiento de la traída de agua potable es de un 84,4%, y el plan de actuaciones para minimizar las pérdidas de agua, que contempla un aumento del referido rendimiento en un 3,6% para que sea de 8 puntos más que el requerido por la nueva normativa, y que con ello se reducirá el índice estructural de fugas de un 2,31 a 2,26 y que el volumen perdido en metros cúbicos por kilómetro de tubería y hora se mantenga en un 0,21%.