Los hombres que durante el inicio de la pandemia sanitaria del covid vendieron gel hidroalcohólico que ellos mismos elaboraron con aguardiente en un laboratorio clandestino en Boiro (A Coruña) han admitido los hechos y han evitado la entrada en prisión.
Tras el acuerdo alcanzado este martes por la Fiscalía y la defensa, la sección sexta de la Audiencia Provincial de A Coruña, con sede en Santiago, ha dictado sentencia declarando culpables a ambos de un delito de estafa y otro contra la salud pública.
Por el delito de estafa se les solicitan 21 meses de prisión a cada uno y por el delito contra la salud pública otros 6 meses, aunque han acordado que no se aplicará la pena privativa de libertad a cambio del pago de una multa.
Para ello, el juzgado ha tenido en cuenta como atenuante la reparación del daño causado pues el dinero que consiguieron mediante la venta ilegal de este producto fue devuelto a las víctimas.
Los condenados tampoco podrán fabricar ni comercializar productos sanitarios durante un plazo de dos años y medio.
De este modo, ha quedado probado que los dos hombres, aprovechando la “escasez” de gel hidroalcohólico durante la pandemia de la covid, comenzaron a fabricar este líquido sin tener las condiciones adecuadas.
Los acusados fueron detenidos en agosto de 2020 en una operación en la que fueron intervenidos 6.400 litros del producto que carecía de poder desinfectante y fue adquirido principalmente por particulares, centros de salud y pequeños negocios, que dieron la voz de alarma con varias quejas tras detectar el fuerte olor a aguardiente.
El gel únicamente alcanzaba un porcentaje de un 25% de alcohol, en lugar del 70% que le corresponde, y la investigación detectó que la empresa distribuidora carecía de las autorizaciones oportunas de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios para fabricarlo.