Vicente Mariño, líder del grupo municipal del PBBI, vuelve a tender la mano al resto de los grupos políticos de la oposición de Ribeira para estudiar un relevo inmediato en la Alcaldía. Así lo manifestó su portavoz tras calificar de “encerrona” por parte del regidor local lo que "sufrieron" en la última junta de portavoces, pues advirtió que el mandatario les ocultó el orden del día “intentando engañar a los grupos allí presentes”, pues les citó para hablar del parking del Centenario y, aunque no figuraba en la convocatoria, también trató el asunto de la gasolinera de Xarás, respecto de la cual un nueva sentencia anuló la licencia de legalización que le concedió el Ayuntamiento.
El PBBI afirma que el alcalde y su equipo de gobierno entraron en “estado de pánico” a raíz de la moción presentada por su partido en relación el expediente de licitación de esa estación de servicio, la sentencia que anula la licencia de legalización de la misma y la reprobación del mandatario local. Mariño de Bricio sostiene que esa forma de proceder está “fuera de todo orden democrático” y que esa junta de portavoces dejó de ser una reunión formal a partir de los dos primeros minutos. El líder de la oposición ribeirense añadió que la actitud y manifestaciones de Manuel Ruiz están "fuera de tono, evidencian poca educación y que está nervioso y sobrepasado por un asunto tan grave como el de la concesión de la licencia", y le reprochó “su modo de actuar tan despótico”.