Un total de 11.128 personas visitaron este año durante la temporada alta —del 15 de mayo al 30 de septiembre— el islote de O Areoso, en A Illa de Arousa. Son las autorizaciones concedidas de un total de 20.850 solicitudes disponibles —en tres turnos diarios y tres tipos de acceso— en los 139 días que dura la época de mayor demanda, por lo que se concedieron más del 53% del total, según datos publicados ayer por la Xunta.

El sistema funcionó “con normalidad y sin grandes incidencias” con una afluencia media inscrita de 80 visitantes diarios. No obstante, en la época de mayor interés, entre mediados de julio y finales de agosto, se cubrieron todas las plazas en la mayoría de jornadas.

El tipo de acceso más utilizado fue lo de atraque sin motor, que rondó el 65% del total, seguido del de atraque con motor (24%) y del de fondeo, que superó levemente el 11%. En cuanto a la afluencia de los distintos turnos, a pesar de que los resultados son semejantes, hay una mayor demanda de la segunda, la que va de las 13 horas a las 17,  pues concentró el 36% del total; seguido de algo más del 33% de la tercera —de las 17 horas al atardecer— y del 30% de la primera, que va del amanecer a las 13 horas.

Toda vez que el máximo de visitantes diarios es de 150 personas, 50 por turno, se observa que entre mediados de julio y finales de agosto se produjo casi todos los días un lleno mientras que en el resto de períodos se detectaron picos de afluencia que normalmente coinciden con festivos y fines de semana.

Hubo 27 denuncias

La de este año fue la primera temporada alta completa con la regulación fijada el año pasado para reducir la presión sobre el islote y que se materializó a través de la Orden de 27 de junio  de 2023 por la que se establecen las normas relativas al uso público y la actividades recreativas en los islotes de los Guidoiros y la isla de Rúa. 

Esa nueva regulación implica medidas de control y, mientras que en 2023 la labor de los agentes ambientales en la zona fue principalmente de carácter informativo, este año se realizaron un total de 27 denuncias por incumplimientos de la normativa vigente. De ellas, 19 fueron a personas que estaban en el islote sin la preceptiva autorización y ocho la embarcaciones por maniobras no permitidas en el entorno.
De cara a próximas temporadas, la Xunta analizará la posible introducción de mejoras  en los procedimientos para la reserva y para el seguimiento y control del cumplimiento de la regulación, para facilitar la labor a todos los agentes.