El traslado de la plana mayor de la Guardia Civil de la Capitanía de Vilagarcía a Cambados se ha adelantado y no esperará a que el nuevo cuartel esté terminado. El Concello recibió ayer la petición de buscarle unas instalaciones y la “única opción factible” para que permanezca con el resto de guardias, dice, es darle el bajo de A Mercé, que está remodelando como nuevas dependencias para la Policía Local. De hecho, la noticia no ha sentado nada bien a sus agentes, que llevan años reclamando más espacio porque el bajo del Consistorio se les queda más que pequeño.
Desde la Subdelegación del Gobierno en Pontevedra indicaron que el traslado “no será inminente” y que el adelanto de los planes iniciales viene por el retraso que ha sufrido la construcción del cuartel cambadés. Aunque ya se retomaron, las obras estuvieron paradas dos meses por problemas con la cimentación y aguas subterráneas que obligaron a cambiar el proyecto y a incrementar el presupuesto en tres millones más (ahora el gasto estimado es de 9,6 millones).
El alcalde aseguró que, para él, la petición también ha sido “una “sorpresa” y que ha pensado en A Mercé porque ya está la plantilla de Cambados, que se reubicó cuando se derribó el viejo cuartel, y no le ve sentido separarlos. “Comprendo o malestar que pode haber, pero non temos outra alternativa, é a única opción factible que se nos ocurre porque o lóxico é que estean todos xuntos e a Policía Local de momento ten onde estar”, argumentó.
Lago también insistió en que se trata de algo “provisional” y mientras no se acaba el nuevo acuartelamiento, cuyo plazo de ejecución es de año y medio, pero que no estará listo, por lo menos, y si no surgen más contratiempos, hasta finales de este 2023. Indicó que después A Mercé será para la Policía porque “para eles se fixeron, a súa medida e adaptadas as súas necesidades, pero está é una circunstancia sobrevenida á que lle temos que dar unha solución e esta é a única que se me ocurre”, añadió. De hecho, considera que “non hai un incumprimento da palabra dada por este goberno”. Cabe recordar que los agentes llevan años pidiendo unas instalaciones más modernas y sobre todo suficientes, ya que ahora carecen de espacio en el bajo del Consistorio. Así, el malestar era notorio, pues han pasado de preguntarles cómo querían las taquillas, las oficinas, la armería... A decirles que no podrán estrenarlas, que tendrán que esperar más.
Lago espera ceder el espacio a la Guardia Civil en cuanto terminen las obras de adaptación que ejecuta el Obradoiro de Emprego porque además les han pedido la “maior brevidade posible”. El regidor también indicó que “é un trastorno, pero tamén unha boa nova porque vén a Capitanía da comarca e iso danos a capitalidade e isto supón máis efectivos e presenza en Cambados. Ademais, eses traballadores veñen facer a súa vida no pobo”.