El portavoz del PP de Cambados, Luis Aragunde, ha presentado un escrito por registro en la Mancomundidade de O Salnés pidiendo tener acceso al expediente completo de la adhesión de Meis al servicio mancomunado de la recogida de basura. Pero, además, solicita en él que esta adhesión se paralice.
La cuestión, recientemente aprobada por unanimidad en el seno del órgano comarcal, ha causado el estupor de su presidenta, a la vez alcaldesa de Meis, Marta Giráldez. “Sorpréndeme isto, non saímos do noso asombro”, reconoce.
No lo hace porque “esta adhesión non afecta en absolutamente nada aos concellos de Cambados e Vilanova”, los dos que hasta ahora disfrutaban de este contrato mancomunado de la recogida de basura. Afirma la regidora que la incorporación de Meis no supone nada contra estos municipios: “Meis vai pagar o seu servizo, imos ter os nosos operarios e os nosos camións”. “Non entendo este escrito”.
Luis Aragunde daba explicaciones poco después. Pide paralizar el procedimiento porque, de momento, no conoce los detalles de esta incorporación y teme que pueda perjudicar de alguna forma “aos veciños de Cambados”. Es por ello, insiste, por proteger el interés ciudadano en su localidad, por lo que ha hecho el movimiento. Y siembra las dudas: “Ao mellor a presidenta da Mancomunidade e alcaldesa de Meis busca beneficiar ao seu Concello a conta dos demais”, o, tal vez, desliza, “utiliza a Mancomunidade para beneficiar ao seu Concello e, se é así, non me parece legal”. “Non o sei”, concede, pero se reafirma, “como veciño de Cambados, síntome afectado”. “Os veciños de Cambados teñen que verse beneficiados dalgunha forma” tras este paso de Meis, declara. Pero es que, además, teme que pueda ser al revés, que solo Meis gane, en detrimento de un contrato previamente diseñado para solo dos municipios.
La versión es diametralmente opuesta a la de Giráldez. Insistió en que su municipio asumirá los costes pertinentes. Recuerda la unanimidad del acuerdo en la Mancomunidade. Y de paso manda también recados en clave política, ya que solo se le ocurren dos motivaciones para esta decisión del PP. La primera, que sea una “estratexia” del grupo popular meisino. De ser cierto y de demostrarse, considera que “deberían dimitir”, ya que esta petición de suspensión iría contra el interés vecinal en mejorar un servicio clave como es este de la recogida. La otra motivación en la que piensa la socialista es que Aragunde actúe movido en realidad por un “interese profesional ou persoal”. E igualmente, “se se demostra que é iso, tería que dimitir”. Pero es que además cree que en ese caso “rozaría outras custións que ao mellor habería que dilucidar nun xulgado”. Algo sí parece tener seguro la izquierdista: “Estas cousas sempre acaban evidenciándose e saíndo todo á luz”. Se verá.