Cambados y A Pobra se han quedado sin las ayudas estatales nutridas con el fondo Next Generation solicitadas para restaurar el Pazo de Torrado y la Torre Bermúdez, respectivamente. Aunque ambos proyectos recibieron puntuaciones altas, el crédito reservado para esta línea, que concederá 208 millones de euros, se agotó. Sobre todo destacó la capital del albariño, donde su plan para reformar y poner en valor tanto el inmueble como los jardines aledaños, alcanzó los 65 puntos; solo uno por debajo de la máxima puntuación concedida. El pobrense recibió 63, estando también entre los mejor valorados. Siempre según la resolución provisional emitida el pasado 5 de julio.
El volumen de solicitudes resultó ser muy elevado y, de hecho, el Ministerio de Turismo había ampliado el plazo de resolución de esta convocatoria, que data de 2022. En concreto, se trata del Programa de Mejora de la Competitividad y de Dinamización del Patrimonio Histórico con uso turístico del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia nutrido con el crédito Next Generation. Más de medio millón de proyectos de toda España concurrieron a la línea y finalmente se eligieron 92 que recibirán ayudas por valor de 208,5 millones.
Cambados ya no tenían mucha esperanza en conseguir esta subvención y ante la urgencia de actuar en el Pazo de Torrado –se llegó a plantear el cierre temporal–, troceó su plan para ejecutar lo más urgente con el plan +Provincia de la Diputación de Pontevedra, es decir, el cambio de toda la carpintería del inmueble, desde las ventanas hasta el suelo, después de haber podido contener la plaga de termitas. El presupuesto es de unos 100.000 euros y el Concello estaba a la espera de la resolución estatal para dar luz verde a su plan B.
Con todo, no renuncia al conjunto previsto, que era una iniciativa muy ambiciosa con actuaciones también en la zona ajardinada, cambiar el tejado que presenta problemas de filtraciones, introducir medidas de eficiencia energética, etc. Para lo cual se buscarían otras vías de financiación porque el montante ascendía a unos 800.000 euros y era inviable asumirlo en solitario con las arcas municipales.
El Ayuntamiento ya había tendo que presentar alegaciones a esta línea porque en un primer momento la subvención fue denegada, pues estaba dirigida a bienes declarados BIC, pero se elaboró un informe justificando la idoneidad del proyecto porque si bien el pazo en sí no lo es, forma parte de uno: el conjunto histórico de Cambados.
La Torre de Bermúdez sí que posee esta protección en la categoría de monumento y en los últimos años también viene enfrentando problemas de filtraciones de agua que contribuyen al deterioro del inmueble y de ahí el plan del Concello de A Pobra.