El Concello de Cambados espera realizar algún acto de homenaje al pintor Lino Silva, fallecido el sábado pasado y que era una figura referente en Galicia. El concejal de Cultura, Liso González, indica que hay varias opciones, pero en todo caso será tras pasar un tiempo prudencial pues, aunque la pérdida siempre es insuperable en estos casos, todavía está muy reciente.
González explicó que ha hablado informalmente con amigos y familiares y que se expusieron algunas ideas, aunque considera que la organización de una exposición sería una de las más adecuadas, para mostrar el legado dejado por el artista, que tenía 74 años de edad.
A lo largo de los años organizó varias muestras con el Ayuntamiento y en varios de sus espacios, además de haber ilustrado carteles del Entroido y de la Festa do Albariño. La última tuvo lugar en Torrado, en 2021, bajo el título de “Horizontes perdidos” y se trataba de un conjunto de paisajes abstractos, algunas máscaras pintadas sobre “cachos” de centolla y algunas esculturas que realizó en los años 60 y 70, antes de estudiar en la Mestre Mateo.
Su muerte causó gran pesar en su villa natal, donde también era un vecino querido por estar siempre ahí para diferentes iniciativas culturales y solidarias. Y el mundo del arte se quedó huérfano, pues era uno de los referentes de la plástica gallega. Durante su trayectoria pasó por diferentes estilos y etapas, influenciado por artistas como Goya o el esperpento de Valle-Inclán. Le atribuían fama de bohemio, pero Silva no se mostraba muy de acuerdo, quizás porque lo suyo era la tranquilidad de sus lugares de costumbre y no era amigo de convencionalismos ni de grandes aspiraciones de fama.