Afundación, la Obra Social de Abanca, presentó ayer en la isla de A Toxa, una campaña informativa bajo el título “Disfruta de la playa sin dejar huella”. Con esta iniciativa se pretende sensibilizar a los turistas que visitan las playas gallegas en torno a “la necesidad de compatibilizar un uso recreativo de los arenales asentado en las buenas prácticas, con las actividades socioeconómicas que se llevan a cabo en estos espacios naturales, como es el caso del marisqueo”, explican.
La campaña cuenta con la colaboración de los concellos de O Grove, A llla y Vilagarcía, de la Asociación de Mariscadoras de Carril y de las cofradías de pescadores de San Martiño do Grove y de San Xulián de A Illa de Arousa. Se desarrollará a lo largo de todo el verano en diferentes arenales de estos municipios, como la playa de Covadelo en la isla de A Toxa, la playa de Xastellas en A Illa, o la playa de Compostela, en Vilagarcía de Arousa.
Una exposición itinerante al aire libre, vallas publicitarias, autobuses y otros soportes publicitarios, así como diferentes vinilos instalados en las propias oficinas de la entidad bancaria de los mencionados concellos, servirán para difundir esta campaña, en la que se invita las personas que visitan estos arenales a respetar las zonas de cultivo de bivalvo, emplear protectores solares no perjudiciales para el medio marino o evitar dejar basura en las playas, “prácticas muy sencillas que, sin lugar a duda, repercutirán en beneficio de todos, tanto de los propios bañistas como de las personas que trabajan en el mar”, señalan.
Esta exposición, al pie de las playas, permanecerá en A Toxa entre el 13 de julio y 1 de agosto, día en el que se trasladará al Carreirón, en A Illa de Arousa, donde quedará hasta el 13 del mismo mes. Finalmente, estará en la playa de Compostela de Vilagarcía hasta el 12 de septiembre.
Además, y como complemento a todas estas actuaciones, serán las propias mariscadoras de las diferentes cofradías las que se encarguen de transmitir de primera mano a los turistas este conjunto de buenas prácticas, facilitando a las personas interesadas diferentes objetos que ayuden a ponerlas en práctica, como pueden ser los ceniceros portátiles para evitar el depósito o enterramiento de colillas en las playas, o unas bolsas destinadas a retirar basura durante los paseos.