El Concello de Sanxenxo cuenta con una propuesta de adjudicación para la obra del mirador de A Peixeira y el campo de San Roque. La empresa ganadora del concurso público presentó una oferta de 942.892,50 euros, lo que supone una rebaja respecto al presupuesto base de licitación de más de 45.000 euros.
 

Además, la empresa que presentó la oferta, también amplía el plazo de garantía en tres años  - hasta alcanzar los cuatro - y se compromete a ejecutar la obra en un plazo de tres meses y medio.

Estos trabajos suponen un cambio significativo en toda la zona, una superficie total de 3.100 metros, buscando alcanzar, tal y como indican desde el concello, dos objetivos: recuperar la fachada marítima del mirador portonovés de A Peixeira y humanizar la conexión con el campo de San Roque. “La intención es que la plaza y el frente marítimo reconecten con su origen”, indican desde el gobierno local de Sanxenxo.
 

Esta obra se enmarca dentro del Programa Provincial de Infraestructuras e Dotacións singulaes para a Execución da Axenda 2030, lo que supone que la Diputación aportará un 80% del coste total de las obras y el concello de Sanxenxo tendrá que hacer frente únicamente al 20% del total.
 

Rescatar la fachada marítima
 

El protagonista de estas obras, como viene siendo sintonía habitual en el concello de Sanxenxo, es darle protagonismo al peatón, dejando el tráfico rodado relegado a un segundo plano.
 

La intención del proyecto es eliminar las barreras arquitectónicas, visuales y ambientales del frente costero. Para ello entre los trabajos se procederá a desmantelar parte del gran muro de contención que está instalado actualmente para recuperar el territorio y   mejorar paisajísticamente y funcionalmente la conexión entre el núcleo urbano y la costa Además, está contemplado incluir diferentes especies arbóreas autóctonas y reutilizar los materiales de la demolición para crear diferentes elementos de mobiliario urbano.
 

En el proyecto de las obras también se incluye la mejora de la iluminación en toda esta zona. Para conseguirlo se reemplazará el sistema actual por uno que cuente con una proyección más baja y que esté totalmente integrada en los muros y las barandillas que acompañarán a las plataformas enlazadas.