La construcción de la esperada pasarela que permita salvar la desembocadura de Rego do Alcalde, en San Miguel de Deiro, da un paso importante en su tramitación. Con el proyecto constructivo redactado desde hace cuatro años, ahora Costas del Estado somete a información pública la solicitud de concesión para la ocupación del dominio público marítimo-terrestre, al ejecutarse buena parte del proyecto en esta franja de protección litoral. El anuncio se publicó ayer en el Boletín Oficial del Estado, abriendo un periodo de consultas de veinte días hábiles.
El proyecto hecho público, encargado por el Ayuntamiento vilanovés, prevé la construcción de una pasarela peatonal que permita salvar esta zona de desembocadura y que medirá un total de 80,28 metros de longitud. Se ejecutará por un presupuesto estimado de 300.327,72 euros, con un plazo máximo de ejecución de cuatro meses y un año de garantía de obra.
El precio incluye el pago de una pequeña faja de terreno que se asienta sobre tres parcelas de propiedad particular y que será necesario expropiar, para lo que se reserva un pago estimado de 475,44 euros. Con todo, la mayor parte de la actuación se desarrollará sobre el citado cordón litoral de dominio público marítimo-terrestre, afectado por Costas del Estado.
Según el proyecto hecho público, la pasarela se resolverá mediante cinco módulos biapoyados de sección en “u”, de 16 metros cada uno, por 3 de ancho, fabricados en aluminio. Se construirán cuatro pilares, de alturas comprendidas entre los 1,3 y los 3,5 metros. La pasarela tendrá una altura máxima en su vano central de 5,46 metros.
Contará con barandillas interiores de aluminio, con pavimento a base de material técnico ecológico y antideslizante.
El proyecto se redactó en 2021, año en que la Consellería de Economía, el Instituto de Estudos do Territorio y Patrimonio Cultural de la Xunta dieron el visto bueno a la actuación. Costas requirió la subsanación de documentación, pasando por la solicitud de concesión necesaria para la ocupación del dominio público. En febrero del 2024, el Concello de Vilanova encargó la revisión y gestión de permisos y autorizaciones, para dar un nuevo impulso al proyecto, que ahora abre una fase de información pública.