El Ministerio de Turismo destina casi 700.000 euros al Parador de Cambados para cambiar las más de 200 ventanas y ventana puerta de las instalaciones con más de medio siglo de existencia, para ganar en eficiencia energética, además de retapizar mobiliario, reasfaltar el exterior, hacer más grandes las plazas de aparcamiento y crear cuatro de recarga de coches eléctricos. 

El proyecto se presentó hace un par de años, pero ha sido preciso negociar con Patrimonio de la Xunta el modelo a seguir, pues el Pazo de Bazán data del siglo XVII y forma parte del BIC del conjunto histórico. Así, se acordó retirar las ventanas más antiguas –instaladas en la reforma de conversión en Parador–; las interiores instaladas en una reforma de 2002 con el fin de conseguir un mejor aislamiento, así como las contraventanas. Todo ello se sustituirá por unas de dos hojas, de madera lacada, también marrón, con cuadros más grandes y que abren hacia dentro, ganando en contención acústica e iluminación de las estancias y disminuyendo riesgos laborales en la limpieza, pues en las de las plantas superiores había que usar un arnés.

Así lo indicó su directora, Meritxell Marcos, en una visita del subdelegado del Gobierno en Pontevedra, Abel Losada, y el alcalde, Samuel Lago. También indicó que la previsión es que estén fabricadas en febrero e instaladas en marzo, además de que no será necesario cerrar, pues se irán cambiando por zonas. 

Losada señaló que esta inversión de 700.000 euros es el “reflejo del compromiso” del Gobierno de España por “un turismo desestacionalizado y de calidad porque el volumen de visitantes es importante, pero vemos que hay una nueva corriente a la hora de primar la calidad, el propio nivel adquisitivo, el nivel medio de gasto de los turistas frente a un turismo más masivo e, indudablemente, la red de Paradores responde a esto”. Las autoridades también destacaron el valor patrimonial del “buque insignia” de los establecimientos de hospedaje cambadeses, apuntó el regidor. 

En otro orden de cosas, preguntado por la demora en la construcción del cuartel, el subdelegado no quiso dar fechas de cuándo se licitará el nuevo proyecto, pero aseguró que “los fondos están garantizados” porque “es una necesidad histórica” y de hecho pidió “reflexión” –por las críticas políticas– “sobre si la presión para lograrlo se produjo a largo plazo”, es decir, antes de los gobiernos del PSOE.