El Campo da Feira de Meis vuelve a acoger hoy la Festa dos Callos tras dos años de parón obligado por la pandemia. La cita gastronómica alcanza su trigésima edición con “moi boas previsións” y “moitas ganas de volver á normalidade”, según afirma la alcaldesa del municipio, Marta Giráldez.
De cara a la celebración del evento, la regidora meisina señala que “o único que nos preocupa é a ola de calor”, que ha provocado la declaración de la alerta máxima por parte de la Xunta de Galicia. En este caso, la inquietud no se debe a que las altas temperaturas puedan disuadir a los comensales de asistir, sino a que puedan afectar a la preparación y conservación del manjar.
“Nun par de ocasións nos últimos anos xa tivemos estas temperaturas e a xente animouse igual”, señala Giráldez. Además, para mitigar los efectos del sol el Campo da Feira cuenta con árboles y con la instalación de una carpa para dar sombra.
Los callos que se servirán empezaron a cocinarse ayer y, aunque Giráldez reconoce que “estamos un pouco nerviosos”, se espera que no haya problemas para la conservación y traslado a la Plaza de España.
Las cantidades del producto que se servirán equivalen a las de la edición de 2019, el último año previo a la pandemia. En aquella ocasión se despacharon más de 5.200 raciones, que se agotaron alrededor de las dos de la tarde.
De esta manera, 600 kilos de garbanzos, más de 1.000 de carne o unas 20 botellas de aceite, entre otros ingredientes, se destinaron a los platos que los comensales pueden degustar hoy. Los mostradores se abren a las 11:30 horas y las raciones tienen un precio de siete euros, incluyendo el acompañamiento con pan y vino.
La jornada estará amenizada por la charanga Alambique y durante la comida habrá música en directo a cargo del grupo Algo Pasa con Mery. El broche lo pondrá a las 22:00 horas el concierto de Budiño.
El fin de semana musical en Meis está siendo también intenso al encontrarse en plena celebración de las fiestas de San Benito. Así, tras la verbena del viernes, que se prolongó hasta bien entrada la madrugada, ayer fue el turno para la actuación de Kiko Veneno, seguido por La Duendeneta.
El deporte también tiene su hueco en la fiesta, con la VII Ruta BTT, en la que se han cubierto todas las plazas disponibles. La prueba ciclista arranca a las nueve de la mañana tras la entrega de dorsales, que se empiezan a repartir una hora antes.
La carrera, que cuenta con la colaboración del club Armenteira, tiene como madrina a Lara Lois, una de las estrellas del ciclismo de montaña gallego. Durante la prueba, los corredores se encontrarán con dos puntos de avituallamiento, pudiendo degustar en el segundo una tapa de callos.