El comienzo de las obras de mejora y ampliación de la lonja de Cambados es inminente y será por la parte que linda con el aparcamiento. Los trabajos tienen un plazo de ejecución de ocho meses y se compatibilizarán con la actividad de la rula, así que la adjudicataria y la Cofradía estarán en permanente contacto para intentar minimizar las molestias. 

El proyecto responde a una vieja demanda del sector ante unas instalaciones obsoletas e incluso difíciles para el cumplimiento de la normativa sanitaria y que además se estaban quedando sin espacio. El patrón mayor, Alejandro Pérez, explicó que la empresa, Xestión Ambiental de Contratas SL, ya iba a empezar a trasladar la maquinaria esta semana, pero el temporal retrasó sus planes. Espera que no exista problema porque además en marzo baja la actividad: “Con que nos quede media cancha para poder facer a subasta podemos ir aguantando”, añadió sobre la obra, que tiene un plazo de ejecución de ocho meses. 

Cabe recordar que las instalaciones ganarán un total de 260 metros ampliando el edificio actual en los dos extremos, donde se habilitarán zonas de carga y descarga cubiertas para los camiones y furgonetas.

No está incluido en el proyecto

Se empezará por la parte exterior de la cara norte donde se ganará el mayor volumen y a donde, entre otras cosas, se trasladará la zona de depósito y lavado de las cajas y las cámaras de frío y congelación, que no están incluidas en la iniciativa sufragada por Portos de Galicia. De hecho, el Pósito está estudiando presupuestos y buscará financiación externa para esta dotación, que prevé costosa. Aprovecharán algunos motores actuales –recientemente sustituidos–, pero faltaría la estructura de aislamiento. También habrá una zona de preparación de pescado. 

Según Pérez, luego pasarán al otro extremo, del lado del bar donde se van a reconstruir los espacios para albergar unos baños y vestuarios –con uno específico para personas con movilidad reducida–, además de la oficina de atención al cliente y de cobros y un cuarto para la carga de carretillas que durante el día servirá para salida de moluscos, porque ahora no se cruzarán con los pescados en su recorrido por toda las instalaciones.

Lo último sería la zona central de subastas, que con la reforma tendrá dos espacios bien diferenciados para las pujas: uno para la de bivalvos (266 metros cuadrados) y otra para pescados (196). También tendrán zonas independientes para su pesaje, las cuales estarán conectadas al puerto para la entrada de los productos cada una con su respectiva puerta. Estas tendrán una medida de 49 metros cuadrados y 20, respectivamente, teniendo en cuenta que hace falta más espacio para la máquina clasificadora de moluscos. En cuanto al quiosco destinado a oficina, albaranes, etc. se modifica por un nuevo elemento movible el cual estará en medio de ambas y tendrá ventanas hacia ellas para darles servicio.

El proyecto suma 1,37 millones de euros e incluye la renovación de la cubierta, así como medidas de mejora de la eficiencia energética y nueva fontanería, entre otros detalles.