No hubo tregua para el Galo de Curral. “Eran as dez e media e xa non quedaba nada”, explica Lolita Vázquez, una de las criadoras de las aves y promotoras del evento, que es ya todo un clásico de las navidades en Meis. Y es que sus actitudes para ser el protagonista de los menús que se preparan durante estas fechas están más que demostrado.
“Estamos moi contentas, pero nos queda a pena de non poder levar máis víveres ao mercado, porque chegaba a xente e xa non tiñas que darlle”, explica Vázquez. Sentimientos encontrados para una cita que la alcaldesa de Meis, Marta Giráldez, define como un “novo éxito”.
Y es que las vendedoras tenían muchos de los gallos ya reservados antes del mercado, para las cenas y comida de Nochebuena, Navidad, Fin de Año y el día 1 de enero, así como para la fiesta de Reyes, donde es tradición también degustar este manjar.
Fueron sobre 170 ejemplares los que se pusieron esta mañana a la venta en el mercado. Duraron una hora. Entre los compradores, algunos muy conocidos, como el cocinero Yayo Daporta, sabedor de que la humildad del gallo es perfectamente compatible con las mesas de los restaurantes más exigentes.