El dúo madrileño pone voz a toda una generación, que se desplazó hasta Sanxenxo para escuchar las voces de Gonzalo y Fernando. Los raperos saltaron al escenario al ritmo de Rumba, del álbum Luna Llena. Sus incombustibles fans invadieron el recinto desde la apertura de puertas, para ver lo más cerca posible a Natos y Waor. El dúo sirvió un auténtico espectáculo en el que cada asistente hizo suyas cada una de las letras. Una “generación perdida” que esta vez no ignoró la luz del faro, haciendo sentir a los madrileños como en casa.
Un triunfo absoluto en su única fecha en Galicia, y es que además, el puesto de Merchandising se quedó sin existencias al finalizar el concierto. Desde éxitos como Bicho Raro o Miedo y Asco, hasta la primera vez que sonaba en Galicia Mal de Amores, los de la capital brindaron un show digno de ser, junto con Aitana, los artistas españoles con más escuchas en el estreno de su álbum.
El ecuador del espectáculo llega a al ritmo de Carretera, del Volumen 2 de Hijos de la Ruina, un proyecto del que también forma parte el también madrileño Recycled J. Con un cuarto de botella de copiloto, el show se acercaba a su fin con más de un fan bañado en lágrimas ante las emotivas últimas letras. No podía faltar Cicatrices. No solo es el himno de una generación, si no que es el himno de todo un género. Todo el reciento se emocionó al ritmo de "orgulloso de mis cicatrices", mientras Natos y Waor observaban como su gran triunfo va más allá de los números que abarcan las plataformas, y es que su verdadero triunfo es hacer que cada persona del público sienta plenamente sus canciones.
Con el público totalmente entregado, y sin ganas de regresar a casa, Natos y Waor cerraron su concierto con todo un "clásico", Cocaína. Dj Saik lanzó la pista de la mítica canción con la que los raperos finalizan sus actuaciones y que, como no, pone a todo el público a saltar. Sin duda, Natos y Waor no solo han roto todos los registros en un género que cuenta con menos apoyo en los medios, si no que pueden presumir de ser "como el ron, legendarios; como el vino, mejor con los años".