La fiesta de la Valvanera de San Tomé cuenta con una nueva comisión organizadora, integrada por un grupo de jóvenes vecinos del barrio que le darán un descanso al eterno impulsor de la celebración tras 40 años de dedicación, Luis Somoza. Quieren revitalizar un festejo con gran tradición, pero como son inexpertos en estas lides, de momento, los cambios serán modestos, aunque sí retirarán la tradición de nombrar a la reina de la fiesta, pues lo consideran extemporáneo. Una de las novedades más destacadas será recuperar las cucañas, la jornada de juegos populares que se perdió hace años. 

El programa, que tendrá lugar los días 7 y 8 de septiembre, contendrá los tradicionales actos religiosos como la misa y la procesión, que repetirá el trayecto estrenado el año pasado: ir hasta la Torre de San Sadurniño en lugar de ir por el centro de la villa. La verbena será el sábado por la noche y el domingo habrá una sesión vermú. Desde la comisión indican que han hablado con la orden propietaria de la capilla de la Valvanera, en el Pazo de Montesacro, y les trasladaron tranquilidad sobre poder seguir usándola en caso de que el asilo se venda. 

La directiva explica que irá viendo cómo se desarrollan los acontecimientos, aunque tiene claro que, llegado el peor escenario, la fiesta no se perderá. Además, cuenta con la ventaja de que, si bien la talla original de la virgen –una advocación mariana– entra en el lote en venta, hace años que emplean una réplica para la procesión. Eso sí, tendría que buscar otro lugar para guardarla y celebrar la misa y, de hecho, reconoce que les gustaría que el templo mantuviera el culto. Es una petición que incluso ha hecho el Concello.

Detalles

El grupo, formado por 12 personas, explica que su objetivo es seguir modelos de otros festejos, con la instalación de una carpa donde se pueda guarnecer el público asistente a las actuaciones, además de instalar una barra con la que recaudar fondos y también introducir algunos cambios en el programa musical, pero siempre al gusto de mayores y jóvenes. 

Somoza no estaba solo para la organización de los actos y, de hecho, contaba con colaboradores, entre los que estaban su propia hija y la actual vicepresidenta de la nueva directiva, pero llevaba gran parte del peso y la preparación de una celebración popular de esta magnitud requiere de muchos manos y Adrián, Mariola, Beni, Vanesa, Sara, Loli, Rogelio, Bárbara, Marta, Ana, Adrián, Tamara y Cris han decidido dar el paso y tomar las riendas.