La programación lúdica estival en el corazón a la comarca agotó la prórroga este fin de semana, con los últimos actos ya pasados por agua. Aún así, Ribadumia no renunció a su Romería de Santa Baia ni A Illa a la última jornada de sus fiestas gastronómicas del verano.
En Ribadumia, la XXXVII edición de la romería se adaptó a la lluvia y celebró gran parte del programa a cubierto, en el auditorio municipal. Allí pudieron disfrutarse las actuaciones de Os Carballeiras, Madialeva, Alecrín, Troula, Añoranzas y Pedro da Devesa.
En A Illa, el Club de Piragüismo fue el encargado de dar vida este fin de semana a la Fiesta del Pulpo, que despidió el verano lleno de actividad en O Cantiño, en el año en que volvieron las fiestas tras el bienio de paréntesis de la pandemia covid.