El acceso a la vivienda es de las mayores preocupaciones que tienen los gallegos, sobre todo entre los jóvenes, que, en muchos casos, a pesar de contar con un trabajo, no pueden alquilar y, menos comprar, un piso o una casa. El precio de los alquileres continúa al alza, datos que todavía son mayores en localidades turísticas como es Sanxenxo que ya se ha convertido en el municipio gallego con el metro cuadrado de alquiler más caro de la comunidad, superando los diecinueve euros en el mes de agosto - tal y como señala el último informe realizado por el portal Idealista -.
Las diferentes inmobiliarias de la localidad señalan que cuentan con listas interminables de personas que quieren alquilar un piso en el municipio y no encuentran ninguna opción. “Hay muchísima gente que nos pregunta por la opción de alquilar un piso en Sanxenxo para todo el año, pero es imposible, no tenemos. Falta vivienda que se oferte en estos términos”, señala Josina Silva, propietaria de la inmobiliaria Tovar en Sanxenxo.
La misma opinión ofrece Bruno Handt, de Inmokasa, quién señala que “hay muchísima demanda y muy poca oferta”. Así, en ambos establecimientos indican que, en el momento que ofertan un piso en alquiler para todo el año en la zona, desaparece. “Los anuncios no duran ni un solo día en las inmobiliarias”, recalca Handt.
Diferentes situaciones
Desde las inmobiliarias plantean distintos aspectos que darían respuesta al problema de la vivienda en Sanxenxo, todos ellos relacionados entre sí: precios altos, poca oferta, aumento de los pisos turísticos y poca protección para el propietario.
“La renta media de una persona que trabaja en Sanxenxo no llega para pagar el alquiler que actualmente se pide”, señala Silva quién calcula que, de media, un piso de dos habitaciones en una zona que no sea a pie de playa ronda los 600 euros al mes. Sin embargo, señala, los alquilan igualmente y, pasados unos meses, “comienzan a aparecer los problemas”.
Por su parte, Juan Rodríguez, propietario de la inmobiliaria que lleva su mismo nombre, señala que el precio de la vivienda, a pesar de que es alto, no es el problema principal de la falta de pisos en alquiler en Sanxenxo. “Sí existen pisos más asequibles, que se pueden alquilar por unos 500 euros al mes e incluso los hay por 400, pero el problema es que los propietarios no los quieren alquilar porque no se sienten protegidos”, cuenta Rodríguez y añade: “ahora mismo tenemos un problema tremendo, la gente no quiere alquilar sus pisos. Si hubiese una protección para el propietario de la vivienda, una ley o algo que los proteja en caso de impagos, el problema se solucionaría, ya habría viviendas”.
Alquiler vacacional
Otra de las razones por las que resulta casi imposible encontrar un piso de alquiler anual en Sanxenxo, señalan desde las inmobiliarias, es la proliferación de los pisos de uso turístico - en total el municipio tiene registrados un total de 54 apartamentos turísticos, además de seis casas rurales, que se traducen en más de 2.700 plazas de alojamiento. “El trabajo en nuestra inmobiliaria, actualmente, el 99% de los pisos que movemos son alquileres turísticos”, señala Josina Silva, de Tovar Sanxenxo.
Las razones, señalan, también son varias: por un lado el turista está dispuesto a pagar más dinero para disfrutar de su apartamento de vacaciones y, por el otro, los propietarios de las viviendas se sienten más seguros a la hora de alquilar el piso a visitantes. “La gente que tiene pisos le interesa más alquilarlo a turistas, tienen en la cabeza que pueden ganar más dinero solo alquilándolo los meses de verano y no siempre tiene que ser así”, señala Bruno Handt, de Inmokasa.
A esta situación se le añade que, según los dueños de las diferentes inmobiliarias, los propietarios se sienten más seguros si alquilan sus viviendas por temporadas y no en períodos largos de tiempo. “La gente piensa que hay menor riesgo de okupación si ofertan su propiedad en alquiler vacacional”, señala Handt y añade: “los propietarios ahora son muy prudentes. Han visto y vivido situaciones complicadas y tienen la idea de que, si les entran inquilinos y no pagan, es muy difícil echarlos”.
Esta línea también la comparte Juan Rodríguez quién indica que ahora es “impensable” alquilar un piso en su inmobiliaria sin un seguro de impago. “Llevo muchos años en esta profesión y he visto de todo. Los propietarios están muy desamparados y es normal que tengan miedo”, señala Rodríguez.
“Esta realidad, indican en las diferentes inmobiliarias, ha provocado que este año se hayan alquilado todas las viviendas ofertadas para turistas. “El mes de julio fue muy bien pero en agosto hemos visto como todo estaba lleno”, cuenta Silva, de Tovar. Su homólogo de Inmokasa señala lo mismo: “este año ha sigo una auténtica pasada”.