Sanxenxo volvió a tener un papel destacado en la gala de entrega de los distintivos Q de Calidad y S de Sostenibilidad de Turismo de Galicia. El municipio recogió este viernes en el Parador de Muxía las insignias, que avalan la calidad turística de A Lapa, Areas, Areas Gordas, Baltar, Canelas, Caneliñas, Major, Montalvo, Panadeira, Silgar, Foxos, Pragueira Paxariñas, Area de Agra, Bascuas y O Espiñeiro, así como la del puerto deportivo municipal Juan Carlos I, que también logró la “S” de sostenibilidad a través de Nauta —empresa que lo gestiona— y la oficina de Turismo. El titular del Área, Juan Deza, la edila y vicepresidenta de Nauta, Paula Martínez, y la concejala de Urbanismo y diputada autonómica, María Deza, asistieron al acto, presidido por el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, y el director de la Axencia de Turismo de Galicia, José Manuel Merelles.
Desde el Concello ven así recompensada su “apuesta por la calidad y la sostenibilidad certificadas”. Ambos distintivos, Q y S, constituyen dos elementos diferenciadores que aportan un valor añadido al destino, mejorando su imagen y reputación, así como su contribución al entorno sociocultural y medioambiental que le rodea.
Nauta estrenará el nuevo distintivo este verano que se suma a la Bandera Azul, la Q de Calidad y la de Galicia Calidade. Los objetivos que se marca la empresa municipal que gestiona el puerto deportivo en su plan de sostenibilidad son el control del consumo de agua a través de contadores para reducir la huella hídrica, reducir las pérdidas de agua, uso de energías renovables y de alta eficiencia, acciones divulgativas sobre el entorno marino, calcular la huella de carbono e implantar sistemas de gestión medioambiental.
Por su parte, Rueda felicitó al sector por alcanzar “cifras record” en 2023, así como por su diversificación y desestacionalización. En este sentido, se refirió a los más de 1,3 millones de viajeros que se alojaron en los establecimientos turísticos gallegos en los primeros cuatro meses del año y a la creciente tendencia a la internacionalización del destino, con un crecimiento del 5 % del número de turistas extranjeros que se alojaron en Galicia en lo que va de curso.