El alcalde de A Illa, Luis Arosa, se reunirá próximamente con Portos de Galicia después de mucho insistir para que sus responsables le recibieran. El regidor irá con la mochila llena, principalmente por el mal estado del Paseo do Cantiño que recientemente sufrió un nuevo desprendimiento, aunque mucho menor. Pero Arosa vas más allá y asegura que la localidad “está abandonada por Portos e a Xunta, en xeral”. Se queja en cuestión de inversiones, pero también del mantenimiento de infraestructuras de su competencia.
Así, explica que una de las rampas de descarga de mejillón de O Xufre presenta un socavón “dende hai semanas e aínda non apareceu ninguén a tapalo, tiveron que ser os mariñeros os que lle meteron unhas cordas e restos para evitar que alguén se manque”. “Temos un porto bastante recente, pero se non se fai un bo mantemento... Parece que están á espera de que pase algo para actuar, pero iso si, aos mariñeiros cóbranlles como se tiveran un porto de primeira, cando non chega nin a terceira. É unha desidia”, lamentó.
Respecto al paseo de O Cantiño, en pleno centro urbano, los años le han pasado amplia factura y el Concello quiere conseguir que la Xunta ejecute un proyecto de remodelación integral, por estética y seguridad, según vienen defendiendo. En concreto, uno municipal que lleva una década sobre la mesa y que consistiría en aprovechar y crear un parking subterráneo.