El Ministerio Fiscal solicita un pena de diez años de prisión para cuatro acusados de detención ilegal y de robo con violencia e intimidación, con la circunstancia agravante de disfraz. Además, pide una orden de alejamiento a la víctima de 200 metros y la posibilidad de comunicarse con ella en un plazo de siete años. Asimismo, el fiscal reclama sendas multas de dos y tres meses con una cuantía diaria de quince euros por los delitos de maltrato de obra y estafa, así como una indemnización de 2.080 euros en concepto de responsables civiles por las cuantías sustraídas.

Los hechos se remontan a junio de 2017, en torno a las 22:30 horas de la coche, cuando la Fiscalía considera que los acusados, cubriendo sus rostros con un pasamontañas, abrieron las dos puertas delanteras del vehículo de la víctima, cuando este se encontraba estacionado en un aparcamiento de A Lanzada, abalanzándose sobre el hombre mientras le exigían la entrega de su cartera —que contenía 240 euros— y su teléfono móvil. De igual modo, valiéndose de la intimidación, pidieron el número PIN de su tarjeta bancaria que, finalmente, consiguieron.

Así, uno de los investigados, “co propósito de privarlle da súa liberdade”, se quedó con la víctima en su vehículo —obligando a esta a agachar la cabeza al tiempo que lo amenazaba con un instrumento que no fue identificado— mientras otros dos acusados consiguieron retirar 200 y 140 euros de la tarjeta del hombre, a las 23:21 y a las 23:22 horas, respectivamente.

Según el relato de la Fiscalía, después de recibir una llamada informando de la imposibilidad de retirar más efectivo, el encausado que permanecía en el vehículo golpeó a la víctima y le insistió: “búscate a vida pero tes que ter máis cartos”. Ante dicha amenaza, el hombre acordó la entrega de un sobre con 1.500 euros en efectivo tras contactar con su familia, que llevó el dinero solicitado a un establecimiento hostelero de Noalla, Sanxenxo. Un sobre con el que se apoderó uno de los encausados, previo acuerdo con los demás presuntos autores del hecho delictivo, tras acudir al establecimiento. 

Tras conseguir el botín, el investigado que retenía a la víctima volvió a amenazarla al advertir “o que lle podería pasar se non estaba quieto”, huyendo finalmente del lugar tras lanzar el terminal móvil de la víctima al suelo. Como consecuencia de los hechos, el damnificado sufrió diversas lesiones.

Por todo ello, el fiscal entiende que los hechos relatados son constitutivos de los delitos de detención ilegal, robo con intimidación, maltrato de obra y hasta dos delitos leves de estafa.

Inicio de la vista oral  

La Audiencia Provincial de Pontevedra ha fijado el inicio de la vista oral para el próximo martes, 28 de mayo, y se prevé que el juicio se extienda también a la jornada del miércoles. 

Así, la vista, que procede del Juzgado de Instrución nº2 de Cambados, arrancará a las 10 horas del martes en la sección segunda de la Audiencia Provincial.