El alcalde de Vilanova cumplió su palabra y ayer no compareció en el acto de conciliación judicial impulsado por la portavoz socialista. Al saldarse sin avenencia, María Vales dará el siguiente paso de denunciarlo por un delito de injurias y calumnias, por haberle acusado en mayo –en plena campaña electoral– de haber cometido corrupción durante sus ocho años como patrona mayor basándose en una denuncia errónea, que era contra otra persona de la Cofradía, la cual, por cierto, ha sido archivada, según informó su abogado. Por su parte, Gonzalo Durán, lejos de amedrentarse, se alegró de que siga adelante, pues aunque no existe ninguna denuncia ni causa abierta contra la ella, insiste en sus acusaciones y considera que lo podrá demostrar en este proceso.
“Seguirei loitando ata o final e ata onde faga falta, porque non se pode soltar pola boca o que che veña en gaña e dicir mentiras. O digo, dixen e direi, e cada vez máis alto: A miña xestión na Confraría foi marabillosa, as cousas fixéronse ben e a xente me avalou”, declaró ayer la concejala a las puertas del juzgado, destacando a continuación que ya no se presentó a las últimas elecciones del Pósito por motivos puramente personales.
El abogado y el procurador del regidor acudieron al acto, pero la presencia de Durán era capital pues el objetivo era que se retractase. Para la defensa de la socialista, su ausencia respondió a una “estrategia” para evitar el juzgado, pero tampoco ven “intención alguna” por corregir la “ofensa” y el intento de “dañar su prestigio”, así que, una vez superado el obligado acto previo de conciliación, prepararán la interposición de la querella para que “sea condenado por un delito de injurias y calumnias, que se estipule la indemnización en la cuantía que estime el juez y pediremos su inhabilitación como alcalde”, explicó su abogado, Alberto Muñoz. Este también destacó el intentó “amistoso” de solucionarlo, pero lejos de eso, “sus acusaciones incluso se han recrudecido”.
El letrado considera que cuentan con pruebas suficientes como las tres ruedas de prensa recogidas por los medios en las que el primer edil insistió en que había una denuncia en Fiscalía contra la expatrona, pero también los vídeos subidos a las redes sociales del Concello y sobre todo el último, donde ya se sabía que su nombre había aparecido por error, cuando “ya estaba despejada toda duda”, apuntó Muñoz.
Para el popular, “el objetivo de esta pandilla era hacerme una foto –en el juzgado– para desviar la atención sobre los problemas que hay con la gestión que dejó María José no Vales”, declaró, siguiendo con el juego de palabras que ya empleó el PP en la campaña electoral para desprestigiarla como candidata. Y es que insistió en que durante su etapa como patrona “se cogió dinero” y aseguró que hay “un clamor en el pueblo” al respecto de asuntos como la “venta de almeja por fuera de lonja, la prórroga de la grúa, salarios que dijeron que iban a devolver y no devolvieron…” . De hecho, se mostró hasta satisfecho con que vaya a dar el paso de interponer la querella, pues advierte que va a pedir que se investigue todo eso, además de que se haga una auditoría de sus ocho años de gestión. “No se puede matar al mensajero, los corruptos son ellos e iremos al juzgado y a donde haga falta. Lo mejor que podía hacer era dimitir, ponerse en manos de la justicia y pedir clemencia; pactar antes con la Fiscalía la condena, porque va a acabar muy mal”, añadió Durán.
Al indicarle que no consta ninguna denuncia ni procedimiento abierto a instancias de la actual dirección de la Cofradía contra ella, señaló la existencia de la denuncia errónea, pues la demandada era una persona que fue en su equipo en sus etapas como patrona. No obstante, y aún sin tener que ver, la defensa de Vales aseguraba esa misma mañana que esto se había archivado, pero, aún así, Durán desconfía: “No lo vi, pero me gustaría verlo. Pero ahora como va a ir a jugado lo vamos a reabrir todo”, advirtió.