La concentración parcelaria de Baión, tras años de paralización, relanza sus trabajos. Lo hace con el inicio de una segunda fase de apertura de viales, en la que la Xunta tiene previsto invertir 1.171.108 euros para habilitar 7,5 kilómetros nuevos.
Todos ellos se suman a los que, a través de una inversión de 1,6 millones, se habían habilitado ya en la primera fase, entonces con alrededor de una treintena de kilómetros habilitados.
El anuncio lo hicieron ayer el delegado de la Xunta en Pontevedra, Luis López, y el alcalde, Gonzalo Durán, en una visita a Baión en la que también participó el jefe territorial do Medio Rural, Antonio Crespo.
El primer edil indicó que uno de los viales de mayor aprovechamiento general será el que se traza siguiendo el llamado Camino Francés, que vertebrará la parroquia, como alternativa a la variante nonata que el Ayuntamiento sigue reprochando a la Diputación.
Durán alabó los avances en la ejecución de esta carretera, entre Pontearnelas y la general entre Vilagarcía y Pontevedra, que espera pueda estar lista a lo largo de este año.
Las obras suponen la aplicación aglomerado en caliente y se acometerán mejoras del firme en hormigón en otras vías ya existentes. Se instalarán tuberías para canalizaciones, marcos, señalización y muros de mampostería.
Alcalde y delegado resaltaron, además, que la nueva red de caminos contribuirá a “poñer en valor” las plantaciones de viñedo que proliferan en el entorno.
Además de la red de viales para este segunda fase, a la parcelaria de Baión le queda todavía recorrido en su procedimiento.
Así, los servicios técnicos están estudiando en la actualidad la resolución de los nada menos que 217 recursos presentados contra las bases definitivas.
Además, también se está procediendo a la elaboración del acuerdo de reestructuración parcelaria, que permitirá determinar y delimitar las nuevas fincas resultantes del proceso de concentración.
La parcelaria de Baión, una de las dos en marcha en el municipio vilanovés junto a la de Tremoedo, incluye a 1.052 propietarios y abarca una superficie de 698 hectáreas que en la actualidad están distribuidas en 6.194 predios. Hasta la fecha, la Xunta lleva invertidos 3,9 millones de euros en los trabajos técnicos y en las obras físicas.