La piscina municipal de Caldas está en obras. La empresa adjudicataria de los trabajos ha empezado la colocación de los paneles fotovoltaicos que permitirán autoabastecer de energía a esta importante equipación deportiva de la localidad. El nuevo sistema, de hecho, permitirá un ahorro energético mínimo del 30% con respecto al actual consumo, lo que supondrá un importante descenso en la factura.
El teniente de alcalde, Manuel Fariña, explica que los módulos fotovoltaicos se instalarán en la cubierta el edificio del pabellón. Todos ellos producirán más de 23.200 kilowatios hora por año. El sistema dispondrá de un sensor inteligente que permitirá la máxima utilización de energía fotovoltaica de forma eficiente, para lo que medirá todos los datos relativos a la producción y al consumo y creará recomendaciones de uso personalizadas, coordinando el funcionamiento con los equipos eléctricos de la piscina y del pabellón. A mayores la piscina tendrá una pantalla que informará sobre la generación eléctrica en tiempo real visible para las personas que visiten el edificio. Habrá también un sitio web de consulta pública que deberá facilitar la información de producción eléctrica en tiempo real y datos históricos de la instalación.
Fariña declara que la apuesta del Concello por las energías renovables se debe a la conciencia sobre la necesidad de una mayor sostenibilidad. “Temos claro que hai que ser responsables, sensatos e tamén dar exemplo”, señala el nacionalista.