El Concello de Vilagarcía, a través de sus representantes en el Consejo de Administración del Puerto, solicitará formalmente la apertura de nuevas zonas de aparcamiento para uso público en la parte de O Cavadelo más próxima a la Praza de Abastos. Todos los partidos con presencia en la Corporación votaron a favor de una moción del BNG en la que los nacionalistas reclamaron más plazas de estacionamiento para que, la falta de ellas, no suponga un problema para comerciantes, placeros y hosteleros. El portavoz del Bloque, Xabier Rodríguez, expuso la posibilidad de que ese espacio en O Cavadelo esté abierto –por ejemplo– los martes y los sábados coincidiendo con la celebración del mercadillo y, por lo tanto, también con las jornadas de mayor afluencia de personas a la capital arousana. Al Puerto se le planteará además que, si así lo considera necesario, se haga una regulación horaria en esa posible zona de estacionamiento.
La moción del BNG provocó un encendido debate entre todos los grupos políticos respecto de la situación de movilidad en la ciudad. “Hai unha clara falta de planificación por parte deste goberno, o que provoca situacións de colapso de tráfico nesta cidade”, recriminó el portavoz de EU, Juan Fajardo. De hecho, y respecto a los aparcamientos disuasorios que existen, manifestó que “o risco de facer acordos con propietarios de parcelas privadas é que estas acaben sendo ocupadas por promocións inmobiliarias e perdamos esas prazas”. El izquierdista también criticó la gestión del gobierno socialista apuntando que “non se pode mellorar a calidade de vida dos habitantes do centro en detrimento dos do rural, porque zonas como A Laxe ou Candihuela agora son usadas como circunvalacións para evitar o colapso doutras vías como As Carolinas ou Rosalía de Castro”. Una falta de planificación que también le achacó el Partido Popular capitaneado por Ana Granja. La portavoz conservadora manifestó que “se está notando que la gente deja de venir al mercado de Vilagarcía, entre otras cosas, porque no tienen donde aparcar”. Incluso se atrevió a dar cifras y declaró que si hace cinco años “venían al mercadillo 5.000 personas ahora apenas lo hacen 500”. Como respuesta a las críticas de la oposición en esta materia el gobierno local reconoció, a través de Tania García, que “somos conscientes de que os cambios de modelo nunha cidade non sempre gustan a todo o mundo. La socialista defendió la política de humanizaciones de su ejecutivo. “Temos que ter en conta que o 59 % dos cidadáns de Vilagarcía viven no centro urbano e que as políticas a nivel mundial falan de que hai que eliminar os desprazamentos en coches”, argumentó. Hizo referencia a la creación de “máis de 2.000 prazas de aparcamentos disuasorios e nesa liña seguiremos traballando”.
Precisamente el debate plenario correspondiente al mes de octubre terminó hablando de estacionamientos de la mano de una moción del Partido Popular en la que pedía más zonas para aparcar cerca del centro de Carril.
Tania García manifestó que ya se ha negociado la cesión de una parcela pública en el entorno de la guardería carrilexa –en la Rúa Santiago– que serviría para aliviar la falta de plazas en esta localidad de la que “somos conscientes”. El Partido Popular proponía otras dos opciones más en el centro, pero el propio ejecutivo socialista señaló que “negociamos e dialogamos nun caso co Sareb e noutro cos propietarios da parcela en cuestión e foi imposible chegar a acordo. Aínda así seguirémolo intentando”.
En el Pleno también se dio vía libre a la adhesión del Concello de Vilagarcía a la planta de compostaje y tratamiento de residuos que entrará en funcionamiento próximamente en el polígono de Baión, en Vilanova. Una decisión que se adopta, según el gobierno local, por el mandato europeo de proceder a finales de este año al compostaje de los residuos orgánicos generados.
El debate sobre la revisión de las tasas e impuestos municipales transcurrió sin sorpresas. PSOE y BNG aprobaron (con la abstención del PP y el voto en contra de Esquerda Unida) la subida en un 2,3 % del recibo del agua y depuración. “Así o marca o contrato e non facelo sería o incumprimento do mesmo e, polo tanto, meternos nun problema”, aclaró la portavoz del gobierno, Tania García. Sobre esa subida no coincidieron ni el Partido Popular ni tampoco Esquerda Unida, o al menos no en esos términos exactos. La portavoz conservadora, Ana Granja, declaró que “estamos en un momento muy complicado con una gran subida de precios” y pidió en concreto para pequeños comercios y emprendedores “una bonificación o un acuerdo para que paguen menos por esta factura”. El izquierdista Juan Fajardo aprovechó el debate para pedir al gobierno la puesta en marcha de una comisión para reestructurar el sistema de tasas e impuestos en el municipio. “As grandes empresas deben pagar máis”, insistió. El alcalde, Alberto Varela, fue el encargado de cerrar el debate incidiendo en que “non estamos en condicions de rescatar esa concesión”.