Con un punto y medio por encima de la media gallega y superando a todas las ciudades: Así se encuentra la congestión de los juzgados de Vilagarcía, según revelan los datos del segundo trimestre que hace públicos el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia y que ponen de manifiesto, una vez más, la necesidad de una cuarta sala en la capital arousana.
Son unas cifras bastante alarmantes, que muestran unos niveles de trabajo que están muy por encima de lo que pueden soportar los funcionarios adscritos al edificio de A Marina.
Los asuntos en trámite al inicio del segundo trimestre eran 4.679, mientras que al fiunal son 4.744. La media de ingresos en los tres órganos es de 189.33, según las estadísticas del TSXG. Son números muy superiores a los de otros juzgados arousanos, como el de Cambados, con 3.829 asuntos en trámite al inicio del periodo, 3.502 al final y 147,75 ingresados de media en las cuatro salas que tiene, una más que Vilagarcía. Al otro lado de la Ría, en Ribeira, el trabajo también es elevado, con 3.269 asuntos en trámite al final del trimestre (31 menos que los que había al principio) y una media de ingresos de 209, pero la tasa de congestión está muy por debajo de la vilagarciana, con 3,33 puntos y tras haber bajado en un 1,8 por ciento con respecto al inicio de año.
Pero es que las cifras son peores que las de ciudades como Vigo (2,35 de congestión), A Coruña (3,31), Pontevedra (2,52) o Santiago (3,09). Los compostelanos, eso sí, suben en once puntos su tasa de atasco con respecto al periodo anterior. Y todavía más preocupante es hacer la comparativa con las cifras gallegas. La comunidad autónoma cerró el trimestre con un aumento del once por ciento en la resolución de asuntos, una reducción de un punto de la pendencia.
En Vilagarcía, sin embargo, la resolución de asuntos cayó en un 5,6 por ciento con respecto al mismo periodo del año anterior, mientras que la tasa de pendencia se incrementó en un 8,3 por ciento. Estas cifras muestran la actividad en las tres salas de A Mariña a 30 de junio y, a la espera de ver cómo sigue el año, todo parece indicar la necesidad de medidas de refuerzo.
En este sentido, son muchas las voces que llevan años reclamando la puesta en marcha del cuarto juzgado en Vilagarcía. En primer lugar, el Pleno de la Corporación, que así lo aprobó en numerosas ocasiones, la última durante este mismo mandato. En segundo lugar, los propios profesionales, que junto a los ciudadanos son los perjudicados de estas tasas. En tercer lugar, sus representantes, a través de sindicatos como Alternativas na Xustiza o la CIG. El gobierno gallego incluyó a Vilagarcía en el listado enviado al Ministerio de Justicia, pero en los últimos puestos. A partir de ahí, las administraciones se echan el balón unas a otras.