La controversia generada en torno al proyecto de los “Camiños seguros” promovido por el Concello de Vilagarcía para la zona de Matosinhos, A Xunqueira y A Lomba ha generado dudas sobre cuántos aparcamientos se perderán realmente en esta zona urbana que muchos vecinos del entorno usan día a día para dejar sus vehículos.
Los grupos de la oposición –tales como Ciudadanos y el Partido Popular– aseguran que se perderán alrededor de 100 plazas de estacionamiento libre y gratuito, mientras que el Concello apela a la importancia de la seguridad vial y a que las plazas que quedarán inoperativas serán sobre 25 respecto a las que hay en la actualidad. En el proyecto –que salió hace poco a licitación– no se hace referencia al número exacto de plazas que quedarán definitivamente tras las obras y a ello se aferra el Partido Popular que ayer compareció con todo el grupo municipal para anunciar que solicitará un informe de la Policía Local para que contabilice el número de plazas exactas que hay en la actualidad y poder así hacerse una idea de cómo va a quedar esa zona. “No estamos para nada en contra de que se mejore la seguridad para los niños que van al colegio, pero tenemos la sensación de que es un proyecto sobre el que no se habló con nadie, que no se ha explicado a los vecinos y sobre el que no se ha pensado el caos que puede generar”, explica la portavoz conservadora Ana Granja.
Los populares –a pie de campo– han hecho sus cálculos y contabilizan una pérdida de 104 aparcamientos una vez que se ejecuten las dos fases del proyecto. Los conservadores apuntan que se perderán bolsas como la que hay actualmente al lado del centro de Matosinhos y que otras muy próximas al colegio Vagalume y a los centros educativos “tendrán un horario limitado para estacionar”. Algo que, señalan, “afectará directamente a todos los que viven en esa zona que se verán obligados a dar vueltas y más vueltas para encontrar un sitio”.
Un argumento que también utilizó Raúl Santamaría que manifestó que “están utilizando una buena intención como es la seguridad vial en torno a los colegios para un proyecto que provoca problemas de movilidad en la zona. Por encima utilizan la demagogia”.
Una vez más –y al igual que hicieron cuando empezaron a funcionar las ciclovías– el PP critica al gobierno de Alberto Varela de “falta de planificación global” y de estudios “que llegan a destiempo”. Sobre ello se pronuncian acerca del anunciado PMUS que “cuando esté listo ya será sobre otra realidad muy diferente a la de Vilagarcía”.
El proyecto está en fase de licitación y será cuando se ejecute cuando se determinará la verdadera trascendencia y afectación del mismo.