El descenso de la natalidad es la tónica dominante en todo el conjunto del territorio estatal y la comarca de O Salnés no es una excepción. La media de nacimientos que se atendían al año en el centro de Ande era de 500, hasta que en 2020 comenzó a notarse un brusco descenso.
“Hace tres años empezó a bajar de forma exagerada. Primero 450, luego 400 peladas...”, explica la matrona Sol Montenegro. El año pasado, fueron un total de 381 las nuevas vidas que llegaron al Hospital do Salnés. Las cifras muestran que, este año, serán similares. Y es que a estas alturas de 2022 habían nacido 335 bebés, mientras que este año van 329, por lo que se espera una evolución pareja, número arriba o abajo.
No se trata, en ningún caso, de un comportamiento que afecte solo a la comarca de O Salnés o a su hospital, que es uno de los más demandados por su servicio de Obstetricia. Es un comportamiento generalizado en todo el Estado, tal y como reflejan los datos del Instituto Nacional de Estadística..
Los datos de la última década para toda España muestran una reducción paulatina, sin demasiada variación de año a año (en 2022 fueron 329.251 y en 2021 ocho mil más), pero sí constante. De tal forma que en 2010 había prácticamente 160.000 nacimientos más al año de los que hay en la actualidad.
En cuanto al análisis por municipios, el Instituto Galego de Estatística muestra que es Vilagarcía, también el de mayor población, el que registró más nacimientos de los del área de influencia de Ande, con un total de 202, seguido por Cambados, con 83.
En cualquier caso, la provincia de Pontevedra es, por el momento, la que mejor resiste al envejecimiento de la población, con una edad media de 46,52 años, frente a los 51,19 de Ourense (la más alta).
El descenso de la natalidad permitió sin embargo al Hospital do Salnés abrirse a parturientas de áreas cercanas. Algo que no se podía hacer desde 2012, debido a la saturación del centro de Ande.
En las instalaciones de Rubiáns hay un registro exhaustivo de estos datos, que permite ir viendo la evolución. “Estamos siempre autoevaluándonos”, explica Conchín Abellás, directora de Enfermería.
El centro de Ande muestra, desde sus inicios, una intensa apuesta por el parto lo más natural posible y por la lactancia materna, que le valió desde 2005 el sello IHAN, o “Hospital Amigo de los Niños”. Un reconocimiento que se encuentra en proceso de reacreditación, para lo que se somete a un intenso proceso de evaluación, con auditores que comprueban “in situ” la forma en la que se trabaja. El Hospital do Salnés es pionero a la hora de impulsar el acompañamiento en el parto, pero también de favorecer el “piel con piel”. Por ello, desde 2007 se impulsa el proceso “madre- bebé” juntos. Ya entonces se permitía pasar al padre a reanimación y, desde 2016, también puede estar presente en las cesáreas. Es algo que ahora comienza a hacerse en otros centros hospitalarios, pero que ya lleva tiempo instaurado en Rubiáns, que sigue innovando. Así lo demuestra con su Consulta de Lactancia, en marcha desde 2022