La Agencia Tributaria se plantea nuevas acciones para controlar todos los movimientos de las tarjetas, que hasta ahora se limitaba a las tarjetas de crédito y de débito, queriendo incluir a mayores las tarjetas de las que hasta este momento disponía de menos información como los monederos electrónicos o operaciones con tarjetas prepago

¿De qué manera Hacienda tiene pensado recabar esa información? Pretende adicionar a esta obligación de recopilación de información a las entidades autorizadas para emitir dinero electrónico y a las entidades de medios de pago (como Paypal) que funcionan como bancos, obligación que en la actualidad solo aplicaba para las entidades bancarias y de crédito que llevan reportando la información, hasta este momento.

Realmente esta información la Agencia Tributaria puede recopilarla de un modo sencillo y directo simplemente requiriendo a las distintas entidades. Hacienda no pretende únicamente recopilar las operaciones realizadas con tarjeta (prepago, monederos electrónicos y aplicaciones de móvil) independientemente de su importe, si no identificar los titulares reales de cada una de esas tarjetas para acotar el fraude fiscal y blanqueo de capitales.

¿Qué consecuencia fiscal tendría esta recopilación de información por parte de la Administración? Con la obtención de los datos que la Agencia Tributaria pretende obtener se abriría la puerta a detectar pequeñas transacciones de plataformas digitales de compra-venta como Wallapop, Vinted, ebay y conseguir que tributen por ITP, por lo que detectarían fraude fiscal de baja intensidad.

Poner a vender ropa que no se usa, esos discos de los años 90, el coche, el alquiler la casa de la playa, ese tipo de negocios que suponían un extra en la economía familiar y utilizados más bien por particulares se pretenderá que grave tributación.

¿Qué datos enviarán estas plataformas a la Agencia Tributaria? La directiva europea DAC7 obliga a la transmisión de información entre los estados miembros de la Unión Europea, por lo que las plataformas deberán de informar sobre los ingresos que sus usuarios obtengan de sus ventas, además de comprobar su veracidad y guardarla con las condiciones exigidas en la norma, identificando al vendedor. Teniendo en cuenta esto uno puede pensar que las entidades extranjeras no tendrían la obligación de informar y por lo tanto podrían escurrir esta obligación; nada más lejos de esa realidad, en España está previsto la aprobación de una Orden Ministerial en la que se regula el modelo censal 040 de alta, modificación y baja en el registro de operadores de plataforma extranjeros no cualificados, por lo tanto recogería todo el comercio electrónico que portarían toda la información de aquellos residentes.

Además de la obligación de suministración de información, Hacienda también se plantea prohibir los pagos con cualquier tarjeta que no sea nominativa en los que no aparezca el titular identificado, endurecer el acceso a terminales de pago electrónico, poner bajo vigilancia a aquellos que cambien de divisa e incluso aquellos contribuyentes que realicen donaciones obligarles a presentar ante notaría un certificado conforme se encuentra al corriente con la Agencia Tributaria.

Asimismo el Ministerio plantea evitar que cualquier persona que pretenda defraudar escondiéndose detrás de tarjetas bancarias emitidas por entidades por sucursales situadas en territorios con reglas tributarias más laxas, planteándose incluso la prohibición de uso de ese tipo de tarjetas. Para dificultar cualquier maniobra fraudulenta, de contribuyentes que operen con bancos o entidades situadas en jurisdicciones no cooperativas, es decir en paraísos fiscales.

La Administración plantea que el reporte de información de periodicidad anual que en este momento realizan los bancos se intensifique de tal manera que se llegue a realizar con mayor frecuencia, esto va a suponer para las entidades un tratamiento de análisis masivo que les conllevará a tener que realizar una inversión considerable en tecnología. 

*Noelia Puceiro es la directora de INTER Asesoría.