La oleada de incendios que afecta a otros puntos de Galicia y el hecho de que haya prealerta de sequía en la zona de O Salnés mantiene a los vecinos de algunas zonas del rural vilagarciano en vilo. Y es que –denuncian– la maleza invade no solo las cunetas y entornos de parques infantiles y de esparcimiento, sino que en algunos casos llega a escasos metros de las viviendas sin que –dicen– “nadie haga nada”. El malestar es palpable en zonas como la de O Vento, en la parroquia de Cea, desde donde denuncian que en la Rúa Parroquia y otros viales colindantes que los vecinos utilizan para acceder a la iglesia, al cementerio o a la Casa da Cultura la presencia de maleza en las cunetas les obliga a caminar casi por el centro de la calzada con el riesgo que eso supone. Se quejan también de la permisividad que existe con propietarios de fincas privadas que las tienen “a monte”, pese a estar obligados por normativa a mantenerlas en perfecto estado al encontrarse muy próximas a las casas.
Algo similar ocurre en Bamio en donde hace un año un propietario se quejaba precisamente de lo mismo sin que la situación haya cambiado “en nada”, pese a los numerosos escritos presentados ante el Concello para que hiciese algo al respeto. Las ramas de los árboles de fincas colindantes le chocan en las ventanas y temen que si hay un incendio “haya una tragedia” y que después haya lamentaciones.