Ampliar la canalización del regato de A Tripeira en A Concha podría ser una de las soluciones para evitar que –en momentos de lluvias intensas– el arrastre masivo de lodo y tierra provoque la mortandad de marisco en una de las zonas más productivas de Vilagarcía. Esta es una de las medidas que la presidenta de la Agrupación de Marisqueo a Pie de Carril, María Porto, expuso al alcalde, Alberto Varela, en una visita que este hizo a la playa con el diputado socialista Julio Torrado. Porto explica que la de A Concha es una de las zonas de las que históricamente más producto se extrae. “É un lugar moi resgardado e, cando hai periodos de temporal, pois fai que nese punto afecte menos”, señala. Además advierte que “a combinación da auga doce e da auga salada tamén parece ser positiva para que nese lugar o marisco críe mellor”.
Según la presidenta de las mariscadoras el alcalde les trasmitió su voluntad de solucionar el problema que hay con una canalización que es antigua y que no responde a las necesidades actuales. Eso sí, advirtió que es necesario el permiso de Costas para poder realizar cualquier tipo de actuación en la playa. “O Concello non conta con todas as competencias neste asunto”, manifestó María Porto. La mariscadora le enseñó la afectación que hubo en el marisco de A Concha a consecuencia del lodo, que es perceptible a simple vista. “Xa parecen as sete plagas de Exipto”, se lamentan desde la Agrupación de Marisqueo. Y es que los problemas en A Concha se suman a los que ya había en A Compostela por la bajada de salinidad y que forzaron a las mariscadoras a cerrar la extracción en plena campaña de Navidad.
Tras la visita a las mariscadoras Alberto Varela pidió a la Xunta medidas “serias e eficaces” para frenar la continua mortandad del marisco y la pérdida de puestos de trabajo en el sector. El propio regidor socialista incidió en que ellos mismos comprobaron que el raño salía lleno de conchas vacías y que los escasos ejemplares de la almeja que se encontraba viva no da la talla para su comercialización. De hecho las propias mariscadoras aseguran que el producto muere antes de alcanzar la talla obligada por ley para poder ser vendido. Así pues tanto Varela como Julio Torrado –portavoz socialista en la Comisión de Pesca del Parlamento– demandan un cambio de estrategia y que la administración autonómica adopte de forma urgente las medidas necesarias para regenerar la Ría para que esta vuelva a conseguir los niveles de productividad con los que contaba hace años.
Ante la reclamación de buena parte del sector de ayudas urgentes y específicas por parte de la Consellería do Mar el departamento autonómico apunta a que está trabajando en ello analizando la mejor fórmula para que estas se complementen con las que pueda otorgar el Estado.
Los números muestran que la producción marisquera ha caído, sobre todo teniendo en cuenta que el libre marisqueo apenas está funcionando y que hay cofradías que han decidido cerrar sus concesiones por la elevada mortandad del producto. Eso hace que los moluscos que lleguen a las lonjas lo hagan para ser subastados a precios de vértigo en plena campaña navideña. Así pues en A Illa la babosa alcanzó ayer los 53 euros de máximo y se vendieron 274 kilos. Un producto que escasea, por ejemplo, en Cambados, donde no fue posible encontrar babosa en la lonja y el día antes apenas cinco kilos. La japónica también sube de precio y rondó los 17 euros, mientras que la almeja fina (con siete kilos vendidos en la rula isleña) sigue en ascenso y se vendió a una medida de 82 euros el kilo. Lo cierto es que son unos precios incluso más elevados que los que se registraron en las vísperas de Nochebuena, que suele ser una cita en la que hay más cenas familiares en las que se consume más marisco que en Fin de Año.