La situación en la Ría de Arousa es "crítica". Lo dicen mariscadoras, rañeiros, patrones mayores y bateeiros de uno y otro lado del mar que antaño fue el edén bivalvo. "Queremos traballar", explica María Porto, presidenta de la Agrupación de a pie de Carril, que bajó desde los 99 a los 70 miembros. Una sangría que, explica, se agrava "cada semana".
En la Cofradía de Vilanova es similar la situación, con un ERTE sobre la mesa y el despido de uno de los vigilantes. En O Barbanza no va mejor. "Chegamos a un punto en que xa é insostible. Ou poñen solucións, como a rexeneración, ou se non toda esta xente vamos a ir todos ao paro", explica Miguel Ángel Iglesias, patrón mayor de Rianxo.
Allí el marisqueo a flote está haciendo muestreos con perspectivas "nefastas" y desde enero "sen cobrar un peso". Porto señala que "non se pode estar pagando semilla e seguridade social, trescentos e pico de euros todos os meses, sen ter ingresos. A xente marcha".
La falta de relevo generacional y la marcha en busca de nuevos trabajos es una realidad con la que ya se enfrenta el sector del mar. Ya no se habla solo de la falta de futuro, sino de presente. Ante esta situación, que llevan años denunciando, se encuentran, indican, con la falta de respuesta de la Xunta.
"O que fai o conselleiro é botar balóns fora", señala Xaquín Rubido, presidente de la PDRA. La plataforma y el sector reclaman una regeneración de los bancos y el saneamiento integral de la Ría. "Se non saben que facer nós si temos solucións", señala Rubido, que reclama diálogo con el sector. "Non se pode consentir que a produción marisqueira esté en perigo", apunta el portavoz de la Plataforma en Defensa da Ría de Arousa. "Estamos olvidados da man de Deus", concluye María Porto