La conselleira do Mar, Rosa Quintana, fue la encargada de defender su gestión en el conflicto de la mejilla después de meses en los que el interlocutor del PP en este tema fue el director xeral de Pesca, Antonio Basanta. La responsable autonómica respondió a las preguntas sobre el conflicto planteadas por BNG y por PSOE y fue clara. “En máis de 35 anos de servizo público non atopei outra fórmula que tivese máis éxito para resolver un problema que o diálogo”, insistió. Y es que –consciente de que en estos momentos no tiene contentos ni a bateeiros ni a percebeiros– Quintana insiste en que todas las decisiones que se han adoptado hasta ahora tienen el aval de los técnicos y que es necesario poner en marcha un Plan de Xestión para optimizar la extracción de la mejilla en las costas gallegas. “Non se trata de frear un problema de agora, senón de buscar unha vía de futuro e iso parece que se esquece”. Aseguró la conselleira que “hai xente do sector que está fóra protestando mentres hai outra dentro dialogando”.
Tal y como se había dicho ya hace unos días la intención de la Xunta de Galicia es aprobar un Plan de Xestión que dé respuesta a la actual forma de producir mejillón en las rías y que adecúe los tiempos de extracción de la cría a su estado y localización. Quintana respondió a las críticas de la oposición asegurando que no es ella la que busca la “utilización política” del conflicto. “Vostedes en función de se están no porto da Illa ou de Laxe defenden a apertura de zonas para os bateeiros ou para os percebeiros e iso tampouco pode ser así”, matizó.
Tanto la nacionalista Rosana Pérez como el socialista Julio Torrado fueron duros con la gestión de la conselleira en el conflicto de la mejilla. Pérez habló en su intervención de “errática xestión” y manifestó que “iso de que ten a man tendida xa non o cre ninguén. Vostede está sola nunha mesa de negociación donde xa non queda ninguén que a escoite”. Torrado por su parte propuso que “o consenso sexa de verdade e que non haxa a sensación de que se impón nada”. Insistió en que “nós propoñemos que se tomen decisións con datos técnicos actuais e non desfasados”. Lamentó el socialista “á súa inflexibilidade, porque nos vén aquí a contar as mesmas medidas de sempre” y le recriminó que “vostede fala de que hai que falar e olvídase dun segundo verbo que é fundamental aquí, que é o de escoitar”. Quintana volvió a hablar en su intervención final de diálogo y de mirada en el futuro.