Hasta 1,24 mg/l por aire aspirado, cinco veces más de la tasa máxima de alcoholemia permitida por la ley, ha dado un varón de 30 años que ha sido detenido por la Guardia Civil en Vilagarcía.

Junto con el delito contra la seguridad vial por conducir bajo la influencia de bebidas alcohólicas, las autoridades imputan al detenido los delitos de resistencia y desobediencia grave a los agentes de la autoridad por darse a la fuga y negarse a realizar las pruebas.

Además, será denunciado por la vía administrativa porque en el test de drogas dio también positivo, en este caso por consumo de cocaína y metanfetaminas, y por conducir de manera negligente.

Los hechos se registraron el pasado sábado 22 de abril en la carretera PO-549, en donde los agentes de la Guardia Civil vieron cómo el vehículo de este joven entraba en una rotonda a una velocidad excesiva, por lo que decidieron seguirle para multarlo.

El conductor hizo caso omiso a las señales tanto luminosas como acústicas para que detuviese su marcha y llegó a circular durante algunos tramos, según destaca el instituto armado, por parte del carril contrario al sentido de la marcha.

El joven, vecino de Portas (Pontevedra), iba acompañado por otras tres personas y fue interceptado varios kilómetros más adelante, negándose inicialmente a realizar las pruebas de alcoholemia, que arrojaron un resultado de 1,14 y 1,24 mg/l en aire espirado.

Se negó también en reiteradas ocasiones a realizar la prueba de drogas, llegando a forcejear con los agentes y mostrando una resistencia "muy activa", indica la Guardia Civil, que se vio obligada a reducirlo y proceder a su detención.

El detenido quedó en libertad tras declarar en sede policial y deberá responder de estos hechos ante el juzgado de guardia de Vilagarcía de Arousa.