El temporal está dejándose notar en Arousa, con vientos muy fuertes en O Salnés, donde las estación de Corón, en Vilanova, registró rachas de hasta 94 kilómetros por hora y la de Armenteira, en Meis, de 95,8 Km/h. No son las más intensas de Galicia, que se registraron también en la zona de influencia de Arousa. Concretamente en Rianxo, en el Pico Muralla, donde se alcanzaron los 132 kiómetros por hora y en Cuntis, en Pico Xesteiras, con ráfagas de hasta 125.

Pese a que se trata de fuertes vientos, incluso en los casos más elevados se podrían considerar huracados (a partir de 120 kilómetros por hora), no hay por el momento grandes incidencias en Arousa. Caídas de árboles, desprendimientos de tejas, contenedores movidas o antenas dobladas son las imágenes que dejan la mañana y las primeras horas de una tarde en la que, eso sí, ya hubo que suspender actividades.

En concreto, el partido del Arosa contra el Boiro, que se iba a jugar en A Lomba. En A Illa, Vilanova y Sanxenxo, los concellos optaron por suspender todas las actividades al aire libre mientras dure la alerta amarilla por viento y la naranja por lluvia. En el caso de Meis, se suspendieron las deportivas. Las precipitaciones se esperan para la tarde. La borrasca Bert, por el momento, no deja daños.

Por la mañana, Vilagarcía celebró en cambio la Media Maratón, que se llevó a cabo sin problema aunque con incomodidades para los participantes.
 

En esta localidad, hubo desprendimiento de ondulines en Juan Carlos I, que retiró Emerxencias y de tendido eléctrico, así como antenas dobladas y contenedores desplazados en Sobradelo. Los Bomberos de Vilagarcía se desplazaron a Vilanova para retirar un árbol que cortaba la carretera en Corón, mientras que los de Ribadumia fueron a esta misma localidad por una plancha que estaba medio desprendida. En Ribadumia, la caída de chapas obligó tabién a intervenir a los efectivos del Consorcio, mientras que en el Paseo Marítimo de Cambados cayó un árbol, al igual que en la AG-553 en Rianxo. Por la tarde, hubo balsas de agua en Baltar (Sanxenxo) y Castrelo (Cambados), un poste caído en O Sixto y una arqueta abierta en Pontearnelas.