El área de Medio Ambiente del Concello de Vilagarcía estudia la posibilidad de implantar un tipo de césped que sea más resistente a la falta de lluvias. Así lo señaló el concejal del departamento, Diego García, en respuesta a la preocupación por el aspecto más seco que algunos jardines y zonas verdes de la ciudad presentaron durante los meses de verano. El edil socialista indicó que existen varios factores que explican ese aspecto. El primero que desde el propio departamento se espació el regado de estos espacios verdes en previsión de que pudiese existir algún problema de sequía o de recortes en el suministro de agua. Algo que, finalmente, no ocurrió debido a que fue un verano especialmente lluvioso. Eso sí, el concejal de Medio Ambiente expone que las altas temperaturas registradas –sobre todo durante las noches– afectaron notablemente a las zonas ajardinadas.
Otro de los aspectos que influye en la resistencia del césped –según García– es el aumento considerable de la población canina en Vilagarcía y el hábito de sus dueños a la hora de llevarlos a orinar. “Deberiamos acostumarnos a levar un botellín de auga para botarlle por encima”, explica García. Cierto es que el número de mascotas caninas que hay en la capital arousana es destacado y que son muchos los dueños que –pese a ser obligatorio– no se hacen cargo de las necesidades de sus perros.
El concejal de Medio Ambiente aclara que el nuevo sistema que se está estudiando forma parte de la agricultura regenerativa, que sirve para poner en valor los suelos y lograr un césped más resiliente. Y es que con el cambio climático se prevé que en los próximos años las temperaturas vayan en aumento y –en contra de lo que pueda parecer por la actual climatología– que vaya lloviendo mucho menos. De ahí que las restricciones de agua puedan ser una realidad y, por lo tanto, haya que buscar métodos para que las zonas verdes resistan sin tanto riego.