Los Bomberos no abandonaron su acampada de protesta en el Obradoiro ni durante la Nochebuena. Vivieron una de las celebraciones más familiares del año apartados de sus seres queridos, pero convencidos de la necesidad de tener activa la protesta enmarcada en una huelga indefinida para reclamar unas “condicións dignas, mellora salarial, incremento de persoal e recoñecemento da profesión. Por xustiza, porque só unha causa xusta pode apartarnos das nosas familias nunha noite tan especial”, explicaban ayer. No obstante, además del calor que otorga el compañerismo, contaron con la compañía de una joven refugiada de Ucrania, sin nadie en España y que ha encontrado en ellos un apoyo.
Cuentan que Svitlana les visita de vez en cuando para mejorar su castellano y “solidarizarse coas nosas protestas”, y ayer fue una invitada en su improvisada mesa navideña. No fue la única, cuentan que a las diez de la noche se les sumó una pareja japonesa de peregrinos y sus dos hijos pequeños que “deambulaba” por la histórica plaza “sen ter onde aloxarse”. “Compartimos con eles o que tiñamos e lle ofrecemos que durmiran ao noso carón”, añaden.
Una situación más de las muchas que viven en su trabajo: “Señores políticos, mentres vostedes durmen, lembren que nós coidamos á sociedade!”, declararon. Y es que no pierden la oportunidad de recordar que son un “servizo esencial” para la ciudadanía que “se atopa en total precariedade”. De hecho, denunciaron que en estos días se han producido “despropósitos” como que, “se xa tres efectivos por quenda é unha cifra insultante para atender a calquera vítima nun sinistro, facelo con dous, aínda o é máis”.
Señalaron que el Consorcio Provincial decidió mantener el Parque de O Carballiño abierto “a pesar de non acadar os servicios mínimos”; con dos bomberos para atender más de una veintena de concellos. El caso es que se produjo un accidente con necesidad de excarcelación y para “evitar agravar as lesións, máis ante o feito de que a falta de persoal ía aumentar o tempo de traballo, o criterio médico (ante a gravidade dos implicados) foi o de axilizar a retirada” de los afectados. Uno falleció poco después y desde el comité de huelga explicaron que “de contar cunha dotación adecuada de persoal, sempre se pode excarcerar ás vítimas reducindo considerablemente calquera posible agravamento das lesións durante as tarefas de extracción, ao adecuar o espazo á vítima e non a revés”. Asimismo se produjo un incendio, pero “eran precisos máis efectivos” y se activó el parque de A Limia, lo cual “demorou” la atención y lo que se podía haber “sofocado antes, de contar con máis efectivos”, resultó en la casa “calcinada por completo”, pues solo se pudo garantizar que no saltara a la vivienda contigua.
“Faise evidente a falta de persoal en cada emerxencia que atendemos”, claman los profesionales, quienes también señalaron que en Carballo, se intentó “disimular” enviando a un efectivo de Protección Civil, además de alertar de que diez parques pasarían el día de Navidad sin dotación suficiente, entre ellos Vilagarcía y Ribadumia.
Y así brindaron para una “pronta resolución” del conflicto, aunque sin alcohol, a riesgo de atraer la mala suerte, pero su “respecto polo uniforme” no les permitía otra cosa.