En Rubiáns estuvieron ayer mirando al cielo hasta casi media hora antes de la cita. Por eso, uno de los grupos participantes lo tuvo claro y, directamente, optó por disfrazarse de chubascos. Y es que el desfile de carrozas más auténtico llegó ayer, como uno de los broches de oro de las fiestas de Santa Plácida y San Ramón y como uno de los momentos más esperados del año por los vecinos de la zona. Es uno de los eventos que se vive en familia y en grupos de amigos, que preparan durante meses originales disfraces. Ayer, las Tanxungueiras hicieron también su aparición por Rubiáns, pero estuvieron muy bien acompañadas por otros personajes como Super Mario. La vendimia como temática también estuvo presente en el desfile.
Los que tengan ganas de fiesta, y antes de que llegue la traca final de Trabanca Badiña y A Torre, pueden disfrutar el sábado en Guillán, con charangas, colchonetas y verbena a cargo de Los Satélites y Costa Dorada.