La presidenta de la Diputación de Pontevedra, Carmela Silva, ha reconocido este lunes que no esperaba “para nada” que el PSOE perdiera el gobierno provincial y ha achacado este resultado a una “tormenta perfecta” a favor del PP. “Estaba absolutamente convencida de que iamos ter un extraordinario resultado”, ha asegurado Silva en rueda de prensa, que “como demócrata convencida” felicita a los populares por recuperar la institución pontevedresa tras ocho años de gobierno bipartito PSOE-BNG.
La dirigente socialista afirma haber tenido un “erro de percepción” al no haber previsto que perderían tres diputados en los partidos judiciales de Pontevedra, Tui y Vigo, para lo cual fue “determinante” los resultados “extraordinarios” del PP en Baiona y O Porriño y los malos resultados del PSOE en toda la comarca de O Morrazo. Carmela Silva ha apuntado en todo caso que socialistas y nacionalistas han sumado el 52,07 % de los votos en la provincia y el PP solo el 36,67 %, a pesar de que éstos sumaron más diputados y alcanzan la mayoría absoluta para poder gobernar.
Tras este resultado, Silva quiere irse “con elegancia” y ha anunciado que realizarán el traspaso de poderes “como hai que facelo”, si bien ha subrayado que “sufriría moitísimo” y con el nuevo gobierno se deshace el “avance trascendental” que ha propiciado su gestión.
“Non quero prexuzgar ao próximo goberno pero espero que non cambien e volvan ao pasado”, ha afirmado la todavía presidenta de la Diputación.