El alcalde de Vilagarcía, Alberto Varela, vuelve a insistir a la Xunta de Galicia que dote cuanto antes de mobiliario y contenido al nuevo albergue de peregrinos de Carril, cuyas obras por fin están terminadas. De hecho parte del equipo de gobierno de la capital arousana visitó las instalaciones con la presidenta de la Diputación, Carmela Silva. Todos aplaudieron el novedoso diseño de un edificio que en su día estaba llamado a ser una casa de la cultura, pero que nunca se había terminado. “É un modelo de acabados inacabados, que nos mostra esas novas miradas que ten a arquitectura”, explicó Carmela Silva. Fue ella la que aplaudió el resultado obtenido tras unos trabajos en los que se invirtieron alrededor de 600.000 euros de fondos provinciales y que tendrá capacidad para un total de 30 personas. “É un albergue de quinta xeración que non só ofrece os servizos básicos de aloxamento, senón outros como lavado de roupa, espacio para bicis e outros máis que se están a demandar”, apuntó Silva. La responsable provincial indicó además que “está claro que estamos ante o mellor albergue de Galicia, non teño dúbida”. La presidenta aprovechó su intervención para aplaudir –sobre todo– la labor de la concejala de Urbanismo de Vilagarcía, Paola María Mochales, a la que se refirió como “unha das mellores concelleiras de Urbanismo da provincia e que está facendo cousas que pasarán á historia desta cidade”. Bromeó con “se puidese faríalle unha opa hostil ao alcalde e levaríaa” e insistió en que “tamén temos que poñer en valor o traballo e a intelixencia das mulleres”.

Por su parte Alberto Varela agradeció a la presidenta de la Diputación el haber facilitado los fondos al Concello para poder ejecutar una obra que coloca a Vilagarcía en el mapa de los peregrinos que hacen las diferentes rutas que van a Santiago. “Hai moitos camiños, pero nós aquí temos o orixinal polo que din que pasou o apóstolo na barca de pedra”, matizó Varela. El regidor socialista reconoció que “o Camiño en Galicia move moito, moitísimo, e Vilagarcía non pode quedar atrás” y recordó que “somos a zona turística por excelencia de todo Galicia”, por lo que entiende que el albergue no hará más que generar nuevas oportunidades. Un matiz en el que también concordó Carmela Silva al señalar que “vai ser un elemento dinamizador para o entorno que é unha das ideas coas que tamén debe cumprir o turismo, a de xerar riqueza e actividade alí donde exista”.

La estética del nuevo albergue es muy novedosa, dado que presenta unos acabados en hormigón que parecen inacabados. Además tiene zonas revestidas de madera y por fuera un enrejado de acero cortén. Las habitaciones tienen capacidad para seis personas cada una y todo el interior está adaptado a las medidas de accesibilidad, con ascensor incluido.

El albergue se incluirá dentro de la Rede de la Xunta de Galicia, de ahí que se pida desde el Concello que lo dote del mobiliario necesario para activarlo ya.